La ansiedad es una respuesta natural del cuerpo ante una situación de estrés, pero hay que tener en cuenta su frecuencia.
Los episodios de estrés son comunes en la rutina diaria, ya sea por el trabajo, academia o relaciones personales. Es así que en ocasiones suele aparecer la ansiedad, un término que se ha popularizado en los últimos años.
Pero, ¿qué pasa cuando esta se vuelve frecuente e incontrolable? De acuerdo con la psicóloga Joselin Cerón, estos dos factores pueden ser una señal de que se está ante un trastorno de ansiedad generalizada (TAG).
Aunque ambos pueden compartir síntomas, como preocupación o tensión, “es importante diferenciar entre un episodio temporal de ansiedad y el TAG, que afecta significativamente la vida diaria y requiere intervención profesional”, explica Cerón.
Signos de estar con ansiedad
Según la experta en salud mental, un cuadro de ansiedad suele ser temporal. Está vinculado a situaciones específicas o eventos estresantes como un examen, problemas en el trabajo, o un cambio importante en la vida.
Sus síntomas incluyen preocupación, nerviosismo, tensión física, y pueden ir acompañados de signos físicos como sudoración o aceleración del corazón. “Estos desaparecen cuando la situación pasa o se resuelve”, dice la psicóloga.
Por su parte, Cerón explica que el TAG es crónico y se caracteriza por una ansiedad persistente. Afirma que dura al menos 6 meses y ocurre la mayor parte del tiempo, sin estar relacionada con una situación específica.
“La preocupación es excesiva e incontrolable, abarca múltiples áreas: trabajo, salud, vida familiar, etc.”, detalla. Esta se acompaña de síntomas físicos y psicológicos como fatiga, insomnio, dificultad para concentrarse, irritabilidad, tensión muscular y problemas gastrointestinales.
“Las personas con TAG sienten que no pueden controlar su ansiedad, lo que interfiere con su capacidad para funcionar normalmente”, concluye la profesional.
¿Qué otros tipos de trastornos existen?
Existen varios tipos de trastornos de ansiedad a más del Trastorno de Ansiedad Generalizada.
De acuerdo con www.medineplus.com hay también el Trastorno de Pánico. Estos son repentinos y repetidos momentos de miedo intenso sin haber un peligro aparente.
Los ataques se producen rápidamente y pueden durar varios minutos o más.
Por otro lado están las fobias. Las personas con fobias tienen un miedo intenso a algo que representa poco o ningún peligro real. Su miedo puede ser por arañas, volar, ir a lugares concurridos o estar en situaciones sociales (conocida como ansiedad social).
En todos estos casos es recomendable acudir por atención psicológica especializada para tratarla. La ansiedad puede ser temporal o incontrolable.