La aprobación de la Ley Orgánica de Eficiencia Económica y Generación de Empleo, por parte de la Asamblea Nacional, plantea un cambio en las políticas con las que se maneja la economía estatal y, además, establece otras reglas de juego para la generación de empleo, la tributación y otros temas.
Propuestas como el estímulo a la creación de plazas de trabajo para jóvenes y a las zonas francas, son dos muestras importantes de los cambios que pretende el Ejecutivo con la Ley económica.
En buena hora que la Asamblea aprueba esta ley, pues antes rechazó un proyecto con algunos puntos concordantes, motivado por el odio y el interés electoral.
“Sin el reglamento, muchos de los puntos de la ley se vuelven inaplicables”.
Ahora, falta que el Gobierno sancione la ley y apresure la emisión del reglamento, sin el cual muchos de sus puntos se vuelven inaplicables.
La ciudadanía merece que sus representantes, por los que se pronunció en las urnas, trabajen en pro de la atención a sus necesidades y no motivados por intereses ajenos a los de la mayoría.
Es de esperar que con esto se promueva un cambio que permita la reactivación económica de un país castigado por las poco acertadas políticas públicas.
Editorial de El Diario publicado este miércoles 20 de diciembre del 2023 en nuestra edición impresa.