A 34 años de cárcel resultó sentenciado un hombre luego de comprobarse que asesinó al novio de su exnovia.
La víctima Marcelo Salazar, de apenas 15 años de edad, recibió alrededor de 16 puñaladas en varias partes del cuerpo.
Debido a esto, el Tribunal de Garantías Penales sentenció a 34 años de reclusión mayor a Kevin Gaibor.
El sospechoso, tras cometer el crimen había escapado del país y sobre él se emitió una alerta roja emitida por Interpol.
Según el tribunal, el hecho de sangre se registró el 19 de mayo de 2023. Ahora el sentenciado estará más de tres décadas en prisión.
El crimen ocurrió mientras el menor estaba en su casa, esperando que terminara un receso de sus clases virtuales, explicó la Fiscalía.
Según las investigaciones, el agresor “actuó motivado por la ruptura de la relación con su exnovia, que había ocurrido un día antes del crimen”, reseñó la Fiscalía.
“El procesado le había dicho a su entonces pareja que le haría daño ‘donde más le doliera'”, se agregó.
El tribunal resolvió por unanimidad imponer al acusado la pena máxima agravada de 34 años y 8 meses de prisión por el delito de asesinato.
El ahora sentenciado escuchó el veredicto desde el centro de detención donde permanece recluido desde su captura.
Sentenciado actuó solo, según la Fiscalía
Dicho caso se hizo público en febrero de este año, después de que el abogado Felipe Rodríguez relató la historia en su cuenta de la red social X.
Gaibor, “al enterarse de que su novia, ante sus maltratos constantes, lo iba a dejar, le advirtió: ‘si me dejas, te golpearé donde más te duele'”.
El sujeto habría esperado a que su expareja y su exsuegra salieran a trabajar para ingresar a la vivienda y asesinar al menor.
La víctima recibió 16 puñaladas entre el cuello y el tórax, según el informe de la autopsia.
La Fiscalía señaló que durante el juicio la defensa del sentenciado “intentó justificar el asesinato con una supuesta patología mental”.
Los jueces desestimaron la alegación de esquizofrenia, pues no hubo ningún documento que la sustente”.
El fiscal dijo a los jueces que las graves heridas que tenía el menor a causa de la agresión le causaron “una hemorragia aguda interna por laceración cardiaca y pulmonar”.
Ahora el sentenciado permanecerá 34 años y ochos meses en una cárcel de máxima seguridad, informó la Fiscalía.