En 30 días la Asamblea Nacional tratará dos proyectos de ley para enfrentar la crisis energética por la que atraviesa Ecuador.
El primero de estos proyectos en ser tratado será el presentado por Daniel Noboa, Presidente de la República.
Para esto, el Consejo de Administración Legislativa (CAL) decidió unificarlo con otra propuesta.
La segunda la presentó el expresidente de la Asamblea, Henry Kronfle, poco antes de renunciar a su curul.
La propuesta de Kronfle, quien ahora es candidato a la Presidencia de la República, tiene 22 artículos que se suman a los 8 del presidente Daniel Noboa.
En ambos proyectos de ley coinciden en que el sector privado podrá bajo su riesgo y desarrollar proyectos de generación eléctrica menores a 100 megavatios, antes el límite eran 10.
Proponen también que el sector privado pueda invertir en proyectos sobre los 100 megavatios.
Para esta última propuesta se requerirá de una concesión y un proceso de selección.
El texto del legislativo incluye artículos que buscan agilizar las autorizaciones del Ministerio de Energía para los proyectos.
Proyectos de ley esperan informe
También pone plazos para cada paso, simplificación de procesos, especialmente en el caso de proyectos de energías renovables como solar, eólica, geotérmica entre otras.
Y para quienes quieran invertir en esas opciones habría incentivos como exoneraciones al impuesto a la renta o también reducción de aranceles para importación de maquinaria.
También se impulsará la creación de fondos para el desarrollo de infraestructura eléctrica.
Las autoridades legislativas enviaron los proyectos a la Comisión de Desarrollo Económico, presidida por Valentina Centeno.
La manabita es jefe del bloque oficialista y que cuenta con aliados que le pueden permitir alcanzar una mayoría.
Esta mesa deberá convocar en las próximas horas a sesión, pues tiene 10 días para presentar el informe para primer debate.
Estos proyectos de ley son en relación a la crisis energética que afecta desde hace algunas semanas a Ecuador.
La crisis energética en el Ecuador se ha agravado tras una temporada de estiaje en las centrales hidroeléctricas, principales generadoras de energía.