Un tatuaje de una calavera es la única pista para identificar el cuerpo de una mujer que estaba en estado de descomposición.
El cadáver fue encontrado en una zona boscosa del barrio Terra Nostra de Jaramijó, a unos 500 metros de la zona poblada.
La Policía informó que el hallazgo lo hicieron vecinos del barrio, quienes dieron aviso a las autoridades.
Al lugar llegó personal de la Unidad de Criminalística e ingresó hasta la zona por un camino estrecho que solo permite el acceso a pie.
El cuerpo estaba sin ropa, con una bota en una de sus piernas, debajo de un arbusto en forma de cueva.
Cerca del cuerpo había ropa interior, pero no se encontró ningún documento que permitiera identificarla. La Policía informó que se trataría del cuerpo de una joven.
Luis Cano, jefe de la Policía de Manta, manifestó que aparentemente la causa de muerte de la mujer fue por ahorcamiento.
Esto lo deduce porque tenía atado en el cuello un pedazo de tela.
En una inspección al cuerpo por parte de la Unidad de Criminalística se descubrió que tenía un tatuaje de una calavera en uno de sus muslos.
Ese sería el único indicio que tiene la Policía para identificarlo. Cano indicó que hacia el lugar donde se halló el cuerpo había huellas de ruedas de una motocicleta.
En el sitio también se encontró un cuchillo.
Cuerpo en estado de descomposición
El cuerpo fue sacado en una sábana que los policías ataron a una madera para poder cargarlo.
El cuerpo fue llevado al Centro Forense para realizarle la autopsia y con ello determinar la causa de muerte.
La Policía indicó que, de ser posible, se tomará las huellas de la mujer para saber si se trata de alguna persona cuyos familiares hayan denunciado su desaparición.
La Policía cree que, debido al estado de descomposición, el cuerpo tendría en el lugar cinco días.
De allí que los agentes de la Unidad de Criminalística debieron usar mascarillas especiales para poder hacer el levantamiento del cuerpo.
Con este último hallazgo, ya son cuatro los cuerpos que están en el Centro Forense como personas no identificadas.
Todos fueron encontrados en zonas alejadas de Manta, Montecristi y Jaramijó con signos de muerte violenta.
La Policía informó que a varios de estos cuerpos, por orden de la Fiscalía, se les debe practicar una prueba de ADN para comprobar si tienen material genético similar a las personas que los reclaman.
