Tras un velatorio reservado a la familia, decenas de personas acudieron el 11 de agosto al Centro de Exposiciones de Quito para dar el último adiós a Fernando Villavicencio.
El homenaje previo al entierro del excandidato presidencial se desarrolló en medio de un fuerte despliegue de seguridad.
Ecuatorianos aún conmovidos por el crimen se reunieron en el lugar para despedir al periodista y exasambleísta, antes de dirigirse al cementerio.
El ataúd fue cubierto con una bandera de Ecuador y su foto.
Los asistentes formaron una larga fila para esperar su turno y dedicarle unas últimas palabras en medio de lágrimas y gritos de apoyo a lo que fue su vida política.
El ataúd con el cuerpo de Fernando Villavicencio llegó al campo santo Monteolivo en el norte de Quito, alrededor de las 17h15.
Sus familiares, amigos y allegados le dieron en último adiós en la sala de velación número 6, informó Primicias.
Ahí rezaron por su descanso eterno y esperaron hasta las 18h30, cuando recibieron la noticia de que era hora de llevarlo hasta el lugar en el que sería enterrado.
En una caravana encabezada por la madre e hijas de Villavicencio, la carroza fúnebre trasladó el cuerpo en medio de la tristeza de quienes lo acompañaron.
Detenidos tras asesinato de Villavicencio
La Fiscalía ha identificado a seis sospechosos del asesinato, que se enfrentan a cargos de hasta 26 años de prisión cada uno.
La agencia federal de Estados Unidos, el FBI, anunció el jueves que contribuiría a las investigaciones del magnicidio.
Fernando Villavicencio había denunciado días antes amenazas por parte uno de los principales grupos del crimen organizado en el país.
El candidato a la Presidencia murió asesinado el miércoles 9 de agosto a la salida de un mitin político.
Cinco de las nueve personas heridas durante el atentado se encuentran aún hospitalizadas, en condición estable.
