El estado de Kerala, en el sur de la India, se encuentra en alerta tras la muerte de un niño de 12 años por el letal virus Nipah, lo que obligó a las autoridades sanitarias a realizar un rastreo de contactos y aislar a cientos de personas.
Se trata, de acuerdo con la National Public Radio (NPR), del tercer brote desde 2018, y la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo declaró como un “virus de preocupación”.
¿Por qué la preocupación?
El doctor Stephen Luby, profesor de enfermedades infecciosas en la Universidad de Stanford, consultado por la organización mediática, explicó que si bien por ahora Nipah no es tan contagioso como otros virus, “cada vez que una persona se infecta, el virus está en un ambiente que selecciona para adaptación humana y transmisibilidad. El riesgo es que una nueva variante más eficazmente transmisible de persona a persona podría generar un brote devastador. De hecho, dado que 70% de las personas infectadas con el virus Nipah mueren, una variante así podría representar la peor pandemia que la humanidad haya enfrentado”.
Por eso, agregó a NPR, es importante “seguir invirtiendo en estrategias para reducir el riesgo de que se extienda y desarrollar contramedidas respecto de los patógenos de alto riesgo”.
Nipah, relacionado con el virus Hendra, se detectó por primera vez en Malasia, en 1998. Los primeros síntomas incluyen fiebre alta, dolor de cabeza y cambios de comportamiento. En una etapa avanzada, puede provocar encefalitis.
Hasta ahora, las autoridades de Kerala han identificado y aislado a unas 251 personas, incluyendo 30 familiares cercanos del menor fallecido. Once muestras dieron negativo el 8 de agosto.
Se desconoce cómo fue que se contagió el niño.
Se cree que los cerdos y los murciélagos de la fruta son los huéspedes intermediarios del virus. También se transmite a través de los fluidos como la saliva y la sangre y no hay una vacuna preventiva.
“Una teoría plausible es que los que se han infectado [en Kerala] comieron alimentos o fruta contaminados con saliva o excremento de murciélago”, señaló a NPR el doctor Thekkumkara Surendran Anish, profesor asociado de medicina comunitaria en el Government Medical College en Thiruvananthapuram.
Otro problema con el virus Nipah es su alta tasa de mortalidad (se calcula en 70%). Cuando apareció por primera vez en Kerala, en 2018, sólo dos de 19 infectados sobrevivieron. En 2019, cuando se volvió a detectar en un hombre de 23 años, el rápido aislamiento evitó más contagios y el paciente sobrevivió.
“Con el Covid, eres más infeccioso antes de que aparezcan los síntomas”, detalló Anish a NPR. “Una vez que aparecen, tu capacidad de infectar a otras personas se diluye. Pero eso no sucede con Nipah.
Cuando aparecen los síntomas, empiezas a contagiar el virus”.
La ventaja actual es que Nipah no es tan contagioso. “Hay supercontagiadores ocasionales que infectan a muchas personas, pero la tasa promedio de transmisión es de menos de una persona por contagiado”, dijo el doctor Luby.
Expertos han señalado que algo que podría ayudar es detectar en qué zonas se ubican los murciélagos que pueden tener el virus, y averiguar qué otros animales pueden ser intermediarios, de modo que se pueda seguir un rastro del virus. De lo contrario, advierten, la situación puede salirse de control.
Nota tomada de Oxaca