A un repartidor lo captaron disfrutando de una rebanada de pizza que estaba destinada a un cliente en México.
Lo impactante para miles de personas en redes sociales es lo que sucedió después.
El repartidor, con mucho cuidado, procedió a realizar cortes precisos en las porciones restantes para “reorganizar” la pizza.
De esta manera disimuló su acto indiscreto y evitó que el cliente lo descubriera a la hora de la entrega.
Sorprendentemente, entre los utensilios que llevaba con él, este repartidor tenía una navaja.
El repartidor la utilizó para seccionar la porción que iba a comer y luego le serviría como herramienta para encubrir su astucia.
Tras haber comido una porción de lo que parecía ser una pizza gigante, el repartidor comenzó a recortar fragmentos adicionales de la masa.
De esta manera creó más espacio para acomodar las rebanadas sin que se notara la desaparición de la porción que había comido.
Incluso tuvo la valentía de volver a reubicar el sello de la caja con cinta adhesiva.
Asegurándose de que nadie pudiera percatarse de que se había adueñado de una parte.
El repartidor no contaba que de un segundo piso lo estaban grabando y el video se colgaría en redes sociales.
El vídeo cuenta con más de 5 millones de visualizaciones y 11 mil comentarios mostrando descontento con la acción del repartidor.
“Por eso los restaurantes deben tener un sello de seguridad”, “no estoy a favor, pero me sorprendió su técnica”.
“Me parece muy deshonesto hacer eso”, “por eso mejor pedir que no las corten en porciones”, fueron varias de las reacciones.
