El Gobierno ha anunciado una reducción en la nómina del sector público, necesaria para optimizar el funcionamiento del Estado, agobiado por un excesivo gasto.
Si bien no se ha dado una cifra de las desvinculaciones, el Ejecutivo ha indicado que se está analizando cada área de la administración del sector público.
El mismo día, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social manifestó que emprenderá una optimización del talento humano.
Lo recomendable es que se haga una evaluación de las funciones y el desempeño del personal, y, además, que se analicen procedimientos y gastos del sector público.
El proceso debe ser técnico, integral y no únicamente en el Ejecutivo ni centrado en unas cuantas instituciones.
“Todas las instituciones del sector público deben analizar posibles recortes de burocracia excesiva”.
Todo el sector público debe comprometerse en esta tarea, indispensable en un país que arrastra un presupuesto deficitario y que no ha podido superar una crisis que se ha extendido por todos los ámbitos. Al final, es una misma caja fiscal la que financia a todas las entidades.
Servirá de poco que se eliminen cargos si se mantiene un deficiente manejo de los asuntos públicos; si la corrupción sigue imperando en contratos y designaciones; si los gastos se descontrolan para cumplir compromisos; si se deja la tarea sólo para el Ejecutivo y otras funciones y organismos no ponen de su parte.
Editorial de El Diario publicado este miércoles 3 de enero del 2024 en nuestra edición impresa.