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Un hombre ucraniano descuartizó a una mujer de nacionalidad rusa, el crimen se registró en una localidad de Perú.

Al extranjero lo arrestaron el jueves pasado acusado de asesinar y descuartizar a una mujer rusa en un centro de desarrollo personal en Yurimaguas.

El ucraniano Iván Kuzmín, de 38 años, y Liudmila Lazarenko, de 44 años, viajaron por la región de Loreto antes de regresar al centro Dos Mundos.

El personal del lugar, preocupado por los gritos de la mujer, intentó entrar en la habitación pero no lo logró. Optaron por llamar a la policía.

“Ellos, al parecer, tuvieron una discusión y, producto de ello, el hombre agredió a la víctima con varios objetos, lo que causó el deceso”, afirmó la fiscal Llesenia del Mar.

Al ucraniano lo encontraron con un cuchillo en la mano junto al cuerpo sin vida de Lazarenko. La mujer estaba descuartizada y tenía daños graves en el cerebro y otros órganos.

Según informes previos, el acusado golpeó a la mujer hasta causarle la muerte y luego la descuartizó.

Ucraniano quería realizar el ritual de la ayahuasca

Las autoridades encontraron drogas en la escena del crimen, lo que refuerza la teoría de que el acusado estaba bajo el efecto de sustancias ilícitas. El sujeto se puso violento y, cuando llegaron los agentes, estaba amarrado, aún así los quiso morder.

Ambos habían llegado al centro para someterse a tratamientos ancestrales y consumir ayahuasca, pero el propietario negó que se vendieran drogas en el sitio.

“Las personas no estaban alojadas aquí, estaban por una amistad, eran pacientes antiguos, estaban de paso”, sostuvo Pepe Ordóñez.

La prensa peruana reporta que el ucraniano y Liudmila se conocieron hace un año y tuvieron una conexión profunda debido a su interés compartido por la ayahuasca.

El marido de Lazarenko informó que su esposa vivía con él y sus dos pequeñas hijas en Tailandia y había viajado al país latinoamericano varias veces para conocer más sobre medicinas ancestrales.

En este último viaje, ella se encontró con el ciudadano ucraniano, quien le quitó la vida de una manera brutal.