El alcalde de Antonio Ante de la provincia de Imbabura, Rolando López, dejó el cargo y se fue del país a escasos días de finalizar sus funciones.
De acuerdo a López, lo hizo porque estaba siendo víctima de amenazas en su domicilio y de extorsiones.
Por su parte, el comandante de la Policía de la Zona 1 de Imbabura en declaraciones a los medios dijo que “Fiscalía está realizando las investigaciones respectivas. El caso se encuentra en etapa de investigación previa, por ello, son los que manejan la investigación y los detalles y sus detalles. Les corresponde a ellos mantener las información con reserva”.
Ante eso, las autoridades y habitantes del cantón se encuentran con incertidumbre y han solicitado una solución ante el abandono de cargo del alcalde.
“Yo no voy a aceptar la renuncia al señor alcalde porque él debería tener la hombría de bien y presentarse al consejo municipal. Pero más que a nosotros, a la ciudad, anunciar los motivos de su renuncia y luego irse”, expresó Jaime Villegas, concejal de Antonio Ante.
También dijo que el burgomaestre envió el documento de renuncia a los ediles firmado de manera electrónica. Sin embargo, recordó que en el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización (Cootad) se establece que para que los concejales puedan aceptar la renuncia tiene que estar presente el burgomaestre durante la diligencia.
