La producción petrolera de Ecuador ha caído a la mitad. Esto debido a la paralización desde el miércoles pasado de los dos principales oleoductos, a causa de un deslizamiento de tierra.
La Agencia de Regulación y Control de Energía y Recursos Naturales no Renovables (Arcernnr) informó que el lunes se registró una producción de 239 mil barriles de petróleo.
Aquello supone una reducción de más del 50 % respecto a los 484 mil barriles que se producían antes del evento suscitado en Napo.
Pozos detenidos por oleoductos
Esta situación obedece a que varios pozos de extracción de crudo han sido paulatinamente detenidos al quedarse paralizados los oleoductos. Esto además ha obligado al Gobierno a declarar el estado de “fuerza mayor” para evitar reclamos por incumplimientos en las exportaciones programadas.
El corrimiento de tierra se dio en el río Marker, en una zona cercana al volcán El Reventador, que mantiene una actividad eruptiva permanente desde 2002.
Un proceso de “erosión regresiva”, que ha causado socavones y el colapso de ciertas áreas cercanas a ríos del lugar. Ha afectado también a tramos de la carretera y a los sistemas de transporte de crudo que cruzan por el sector.
Por el punto afectado del río Marker pasa tanto el Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE), que opera Petroecuador, como el privado Oleoducto de Crudos Pesados (OCP). Este último suspendió sus operaciones para evitar un derrame luego que algunos soportes de la infraestructura quedaran en el aire.
Petroecuador indicó este martes que en las próximas horas concluirán los trabajos de reparación en el SOTE. Agregó que se procederá con un arranque progresivo del bombeo de crudo.
Pese a la presencia de condiciones meteorológicas adversas en la zona, un equipo de la compañía pública y del Cuerpo de Ingenieros del Ejército apoya las actividades. Además, afina las últimas labores para concluir con las obras en los tiempos previstos, añadió la estatal petrolera. EFE