Los premios Nobel abren este lunes con la habitual ronda de ganadores una nueva edición marcada por la pandemia de coronavirus, que volverá a reducir al mínimo, como el año pasado, la ceremonia de entrega de los galardones, punto central del programa que se celebrará dentro de tres meses.
Entre los días 4 y 11 octubre se conocerá el nombre de los ganadores en las seis categorías en las que se dividen los galardones más prestigiosos: Medicina o Fisiología, Química, Física, Literatura, de la Paz y Economía.
Aunque el proceso de selección y anuncio de los premiados seguirá la pauta habitual, no ocurrirá lo mismo con su entrega: la Fundación Nobel comunicó hace un par de semanas que la ceremonia del 10 de diciembre tendrá un formato reducido y que los galardones serán entregados en los países de origen o residencia de los distinguidos.
Falta por saber si el Comité Nobel noruego hará lo mismo con el premio de la Paz, que se falla y entrega en Oslo por deseo expreso del creador de los centenarios premios, el magnate sueco Alfred Nobel, ya que Noruega formaba parte en su época del Reino de Suecia.
Nobel (1833-1896) se hizo millonario con sus inventos, pero las consecuencias del más famoso, la dinamita, lo convencieron para legar su fortuna a crear unos premios que reconociesen los logros en los campos del conocimiento, las letras y la lucha por la paz.
Así, dispuso en su testamento que su dinero se invirtiese en valores inmobiliarios y seguros, y que los intereses se dividieran en cinco partes iguales para premiar a personalidades en otros tantos campos, independientemente de su nacionalidad.
Seis décadas después, el Banco de Suecia instituyó un sexto premio Nobel, el de Economía, que se otorga desde 1969.
Todos los Nobel siguen un proceso de elección similar: científicos, académicos o profesores universitarios nominan a sus candidatos y los distintos comités Nobel establecen varias cribas para elegir al ganador o ganadores, hasta tres por premio.
Y tienen la misma dotación económica, este año de 10 millones de coronas suecas (980.000 euros, 1,1 millones de dólares).
SIN CLAROS FAVORITOS EN LITERATURA Y PREMIO DE LA PAZ. Los dos Nobel que más expectación generan cada año, el de Literatura y el de la Paz, se presentan esta vez sin favoritos claros en las quinielas previas.
Así, para el de Literatura aparecen clásicos de las especulaciones en los últimos años como el japonés Haruki Murakami, el keniano Ngugi Wa Thiongo y la guadalupeña Maryse Condé.
Entre quienes suenan a suceder a la poetisa estadounidense Louis Glück en el palmarés del premio figuran también otra lírica como la canadiense Anne Carson, su compatriota la narradora Margaret Atwood y la novelista rusa Lyudmila Ulitskaya.
Las quinielas para el Nobel de la Paz, que el año pasado premió al Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas, están dominadas por candidatos relacionados con la defensa de los periodistas, el medio ambiente y temas sanitarios.
El Comité para la Protección de los Periodistas, Reporteros sin Fronteras, la Organización Mundial de la Salud, la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y la activista medioambiental sueca Greta Thunberg son algunos de los nombres que suenan para ganar este prestigioso premio.
SOLO EL 6 % DE LOS GALARDONADOS SON MUJERES. Desde que en 1901 se falló la primera edición de los premios, los Nobel -que han quedado desiertos en 49 ocasiones- han distinguido a 930 personas y 25 organizaciones, algunas varias veces, como el Comité Internacional de la Cruz Roja, el bioquímico estadounidense Linus Pauling o la científica Marie Curie.
Curie ganó el de Física en 1903, compartido con su esposo Pierre y Henri Becquerel, y el de Química en solitario en 1911, una rareza en el palmarés de los Nobel, en los que no obstante las mujeres tienen un papel marginal.
Apenas el 6 % del total de premiados son mujeres (57 en total), y casi la mitad de ellas (28), han sido distinguidas en las dos últimas décadas.
En la última edición fueron cuatro las galardonadas: la estadounidense Andrea Ghez (Física), su compatriota Jennifer A. Doudna y la francesa Emmanuelle Charpentier (Química), y la también estadounidense Louise Glück (Literatura).