La labor para combatir la desnutrición infantil en Ecuador debe abarcar un trabajo integral, más allá de la provisión de suplementos alimenticios o de comidas en los planteles.
Ecuador tiene, según la FAO, el segundo índice más alto de desnutrición crónica infantil en toda América Latina y el Caribe.
En el país, el 23,1 por ciento de los niños menores de dos años sufre de esa enfermedad, un problema de salud serio que tiene múltiples causas, no solo de salud, sino sociales.
La malnutrición y la subalimentación también tienen tendencia al alza.
Unos 2,7 millones de personas, el 15,4 por ciento de la población ecuatoriana, tiene problemas de subalimentación.
Es preciso enfatizar la lucha contra la malnutrición, pero desde todos los ámbitos.
“El trabajo contra la desnutrición infantil debe desarrollarse desde todos los ámbitos”.
En las tres últimas décadas, en el país se han ejecutado cerca de 12 programas vinculados con la salud y la desnutrición, pero los indicadores se mantienen; por lo tanto, hay que cambiar las estrategias.
El trabajo debe ser multidisciplinario, para lo cual se requiere acometer soluciones en todos los ámbitos y no solamente en lo sanitario o en lo educativo.
Hay que evitar que la desnutrición siga golpeando, sobre todo, a la infancia. La remediación debe empezar cuanto antes.
Editorial de El Diario publicado este miércoles 1 febrero del 2023 en nuestra edición impresa.