La Cancillería colombiana está investigando si hay colombianos involucrados y afectados por la masacre en una cárcel de Guayaquil, en Ecuador, que hasta ahora dejó 118 muertos, informó este viernes este organismo.
La Cancillería estableció “un contacto permanente” con el consulado colombiano en esta ciudad ecuatoriana “para determinar si en esos hechos resultaron afectados ciudadanos colombianos”, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado.
“Sin embargo, debido a la difícil situación que se atraviesa, las autoridades de Ecuador aún no suministran información sobre la nacionalidad de los fallecidos ni de las personas heridas”, agregó.
La reyerta, ocurrida el pasado martes en la Cárcel Número 1 de Guayaquil, conocida también como Penitenciaría del Litoral, dejó al menos 118 reos asesinados y otros 80 heridos.
Tras la masacre del martes, el presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, decretó el estado de excepción en todo el sistema penitenciario y dispuso que las Fuerzas Armadas y la Policía ejecutaran las acciones necesarias para restablecer el orden y prevenir nuevos casos de violencia en el interior de los centros penitenciarios, controlados por bandas vinculadas al narcotráfico.
En la nota, la Cancillería colombiana también ofreció “toda su colaboración y solidaridad al Gobierno de Ecuador y a sus ciudadanos en estos momentos de dificultad”, así como condenó la violencia.
De conocer más información sobre la nacionalidad de los fallecidos o heridos, el consulado informará a las familias, dijo la Cancillería, que no reveló si en este centro penitenciario se encuentran reos colombianos.
El director del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad y Adolescentes Infractores (SNAI), que tiene a su cargo el sistema penitenciario de Ecuador, Fausto Cobo, quien dimitió del cargo el lunes, alertó sobre la fuerza de las bandas que operan al interior de las cárceles, donde incluso se usan explosivos y armas de grueso calibre.
Las bandas que actúan en las cárceles, que tendrían conexión a carteles de la droga, sobre todo de México, según dijo Cobo, tienen un “poder igual o superior” al Estado.