El 12 de septiembre, la Iglesia católica celebra a San Guido de Anderlecht, canonizado en 1112 por su vida de pobreza voluntaria y peregrinaciones.
Orígenes y juventud
San Guido nació en 950 en Anderlecht, Brabante, Bélgica, provenía de una familia humilde. Desde joven, mostró inclinación religiosa, sirviendo como sacristán en la iglesia local.
Su devoción lo llevó a estudiar los conocimientos religiosos y se destacó por su servicio a los pobres. Tras la muerte de sus padres, heredó propiedades, pero las vendió para ayudar a los necesitados, según el Martirologio Romano.
Guido vivió como laico consagrado y combinó trabajo manual con oración. Su humildad lo convirtió en modelo para los fieles de su tiempo.
Vida como peregrino de San Guido
En el siglo XI, Guido emprendió peregrinaciones a Roma y Tierra Santa, recorrió Europa a pie. Como peregrino, ayudó a los enfermos y pobres en los caminos, viviendo de limosna. En Roma, se asoció con la Basílica de San Pedro, donde sirvió durante años.
Su peregrinación a Jerusalén lo expuso a peligros, pero regresó fortalecido en su fe. Considerado precursor de San Francisco de Asís, Guido renunció a bienes materiales por una vida de mendicidad evangélica, según registros eclesiásticos.
Filosofía y espiritualidad
La espiritualidad de Guido se centró en la humildad, la pobreza y el servicio al prójimo. Inspirado por el Evangelio, vio en los pobres a Cristo, por lo que priorizó la caridad sobre la comodidad.
Su vida itinerante reflejó la confianza en la Providencia divina, según biografías medievales.
Canonización y reconocimiento
San Guido fue canonizado en 1112 por el papa Pascual II tras confirmación de milagros, como curaciones atribuidas a su intercesión. Su santidad se basa en su vida virtuosa y servicio.
Es patrono de Anderlecht y de los viajeros.
Celebración del 12 de septiembre
La festividad de San Guido se celebra el 12 de septiembre, fecha de su muerte en 1012, según el Martirologio Romano.
En Anderlecht, la iglesia dedicada a él acoge misas solemnes. Su culto es fuerte en Bélgica.
Legado en la Iglesia de San Guido
El legado de Guido incluye su influencia en la espiritualidad laical medieval. La iglesia de Anderlecht preserva su memoria, y su ejemplo inspiró a peregrinos.