Dos policías han sido asesinados en menos de 48 horas en Guayaquil, Guayas, generando gran preocupación en la comunidad. Javier Andrés Quimí, de 29 años, cabo segundo en el Distrito Ceibos, fue la primera víctima.
El crimen del agente se registró la noche del 30 de julio. A Quimí lo atacaron en la cooperativa Reina del Quinche, ubicada en el Guasmo Sur.
El jefe del Distrito Sur, Freddy Ávalos, informó que Quimí recibió amenazas tras un operativo en enero y estaba previsto su traslado a Galápagos el 5 de agosto.
Los reportes iniciales sugieren que los agresores eran dos individuos en motocicleta, y en la escena del crimen se hallaron seis casquillos de bala. A Quimí lo encontraron sin vida fuera de una residencia en el Guasmo Sur, lugar donde residía.
El 31 de julio, la Policía Nacional comunicó la captura de dos presuntos responsables del asesinato, uno de los cuales es menor de edad. Este arresto se produjo en el marco de las investigaciones en curso.
El lunes por la noche, en otro trágico suceso, a Luis Manuel Corrales Mora, también policía, lo asesinaron en una vivienda en el Suburbio de Guayaquil. Corrales intentó detener un robo durante una reunión familiar y recibió al menos siete disparos. Hasta el momento, cuatro personas están detenidas en relación con este caso.
La institución policial investiga los hechos violentos en los que dos policías murieron.
