Los frecuentes accidentes de tránsito que sufren unidades de transporte público en el país muestran la necesidad de que se hagan controles más exhaustivos.
El año pasado se registraron 2.360 accidentes de tránsito que involucraron a vehículos de transporte público, en los que murieron 379 personas in situ (es decir, en el lugar del siniestro) y quedaron 2.244 heridos.
En enero del 2023, 209 accidentes dejaron 193 heridos y 26 muertos, según cifras de la Agencia Nacional de Tránsito.
49 por ciento de los vehículos involucrados fueron buses; el 36 por ciento, camiones.
“Nadie sale a matar, pero la mayoría de los accidentes puede prevenirse”.
La falta de un control frecuente y rutinario del estado de los vehículos, el casi nulo seguimiento de la idoneidad de los conductores por parte de los organismos de tránsito y de las cooperativas pueden ser las causas principales, a las que se suman otras como la irresponsabilidad de muchos choferes, el exceso de velocidad y de pasajeros, el irrespeto a las normas, la impericia, por citar algunas.
Es necesario que haya controles más estrictos en las terminales terrestres y en las vías.
El transporte público tiene que ser seguro pues, si bien es cierto que, como se asegura, no salen a matar con los vehículos, la mayoría de los accidentes puede prevenirse.
Editorial de El Diario publicado este jueves 23 febrero del 2023 en nuestra edición impresa.