La explosión de un taxi ocurrida este domingo ante un hospital de Liverpool (noroeste de Inglaterra), en la que un hombre falleció y otro resultó herido, ha sido declarada un acto terrorista, según confirmó este lunes la policía de Merseyside, que ha detenido a un cuarto sospechoso.
En una rueda de prensa para dar más detalles del suceso, el subinspector de la Unidad Antiterrorista del cuerpo policial de North West, Russ Jackson, reveló además que la explosión fue provocada, según sus pesquisas, por “un dispositivo de fabricación casera improvisado que llevaba el pasajero del taxi” que murió.
“Aunque la motivación aún no se comprende, teniendo en cuenta todas las circunstancias, se ha declarado como incidente terrorista y la policía antiterrorista continúa con la investigación, que seguirá centrada en entender cómo se fabricó el explosivo, la motivación de lo ocurrido y si hay alguien más implicado”, dijo. EFE