Dos soldados profesionales muertos, uno desaparecido y cinco más heridos es el saldo de un combate entre tropas del Ejército colombiano y disidencias de las FARC en una zona rural del departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, informaron este martes fuentes castrenses.
Los enfrentamientos ocurrieron en el caserío La Mesa, del municipio de Roberto Payán, informó el Ejército en un comunicado en el que explicó que la tropa realizaba “operaciones para garantizar el retorno de las familias desplazadas de esta región por enfrentamientos entre grupos terroristas que pretenden mantener el control del narcotráfico” en la región.
Los soldados muertos fueron identificados como Januar Jhonatan Gutiérrez Titimbo y Juan Clímaco Guetocue Volveras.
Los cinco soldados heridos en los enfrentamientos con la estructura “Franco Benavides” de las disidencias de las FARC fueron atendidos por los enfermeros y, posteriormente, trasladados vía aérea a un centro hospitalario especializado de la región donde reciben atención médica.
Según el Comando de la Fuerza de Tarea Conjunta de Estabilización y Consolidación Hércules, los militares hacen parte del Batallón de Operaciones Terrestres No.14.
La información agregó que en el sector continúan las operaciones militares con el fin de neutralizar el accionar de las disidencias de las FARC.
El Gobierno colombiano considera al narcotráfico como una de las principales causas de la violencia en el país y por eso uno de sus focos es combatir ese delito.
Según el informe anual de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, en inglés) que fue presentado el pasado 9 de junio en Bogotá, los cultivos de coca en Colombia se redujeron en 2020 a 143.000 hectáreas, un 7 % menos que el área sembrada en 2019.
Sin embargo, a pesar de la reducción del área sembrada de coca en los últimos años, que pasó de 171.000 hectáreas en 2017 a 143.000 a final del año pasado, la producción de cocaína va en aumento debido a la productividad de las plantas y las mejoras tecnológicas. EFE