Andrés Macías sostiene que la venta de mascarillas ha disminuido.Él trabaja en una farmacia, y recuerda que cuando inició la pandemia del COVID-19, en marzo del año pasado, las mascarillas escasearon e incluso el precio subió, al punto que las KN y KN95 costaban hasta dos y 5 dólares, y la quirúrgica, a 75 centavos la unidad.
Pese al alto costo, la gente se vio obligada a comprarlas, especialmente quienes trabajaron en primera línea durante la pandemia.
Macías dice que actualmente la demanda de las mascarillas ha bajado en un 80 por ciento.
Las mascarillas quirúrgicas valen diez centavos la unidad, y la caja, a dos dólares. Las KN no pasan de 50 centavos.
Macías sostiene que esto se debe a la vacunación y a que el número de contagios ha disminuido en relación a meses pasados.
A lo largo de los meses, organismos como la Organización Mundial de la Salud han insistido en que el uso de la mascarilla es fundamental para evitar contagios.
Médicos y personal de salud exhortan a la ciudadanía a mantener las medidas de bioseguridad.