Un vuelo primer humanitario, fletado por el Gobierno ecuatoriano, llegó este viernes a Quito con 248 personas evacuadas de Ucrania.
El airbus A330 de World2Fly llegó poco antes de las 11.00 hora local (16.00 GMT) al aeropuerto “Mariscal Sucre”, de Quito, donde decenas de familiares esperaban a sus hijos, sobrinos, hermanos y nietos.
Aplausos y lágrimas estallaron en la zona del aeropuerto donde esperaban los familiares con globos, fotos, flores, banderas de Ecuador y Ucrania así como carteles con leyendas de bienvenida.
“Te amamos Karito. Bienvenida a casa”, “Dios bendice”, “Gracias Dios”, “Bienvenidos Josué y Tiffany, les queremos mucho”, “Joshua, mi hijo amado, eres un guerrero. Te esperamos”, se leía en algunos de los carteles que levantaban emocionados los familiares.
Otro cartel hacía alusión al trabajo de las autoridades: “Dios le bendiga por su gestión, señor canciller”.
El canciller, Juan Carlos Holguín, escribió en Twitter que los 248 ecuatorianos serán recibidos por las instituciones como Cruz Roja Internacional.
“Autoridades hemos decidido no estar allí por respeto a sus familias”, indicó antes de señalar que un segundo vuelo humanitario partirá esta misma noche.
Varios de los ecuatorianos evacuados saludaban a su llegada desde las ventanillas de la aeronave, mientras otros se comunicaban con sus familiares por WhatsApp, según relataron los parientes que se encontraban en la zona de espera del aeropuerto.
Al campo de aviación en Quito también llegaron ocho mascotas de los evacuados de Ucrania.
ASIENTOS VACÍOS
El vuelo que salió ayer, jueves, llega con alrededor de un centenar de asientos vacíos después de que un numeroso grupo se quedara sin poder abordar el avión en Polonia al no encontrarse aparentemente en las listas que manejaba la tripulación del vuelo.
El canciller Holguín argumentó que esta circunstancia se debió a que en este primer vuelo humanitario se dio prioridad a los ecuatorianos que se encontraban en Hungría y Eslovaquia.
“Tuvimos que tomar esta dura decisión debido a un cambio operacional”, señaló el jueves en un mensaje en vídeo publicado en redes sociales.
El ministro de Exteriores detalló que los ecuatorianos que se quedaron en tierra en Varsovia fueron trasladados para que tengan alojamiento en la capital polaca y prometió que habrá otro vuelo humanitario para ellos y el resto de sus compatriotas repartidos en diversos puntos de Europa del Este.
Antes de poner rumbo a Quito, el vuelo chárter, que salió de Madrid, hizo dos paradas en Budapest y Varsovia, las dos ciudades donde se concentraron la mayoría de ecuatorianos que dejaron atrás Ucrania.
ECUATORIANOS EN MÉXICO
Holguín informó este viernes de que nueve ecuatorianos evacuados desde Ucrania llegaron a México en un vuelo humanitario de ese país.
“Nuestros compatriotas ya arribaron a México, en un vuelo que trajo 139 pasajeros desde Rumanía”, escribió el titular de la diplomacia ecuatoriana en su cuenta de Twitter.
Se prevé que los ecuatorianos lleguen mañana, sábado, a Ecuador.
“Gracias nuevamente al Gobierno de México por su solidaridad y a su embajadora en Ecuador”, Raquel Serur, indicó Holguín.
México abrió cupo en su vuelo humanitario para 16 ecuatorianos, pero debido a que adelantó un día el vuelo previsto inicialmente para este viernes, solo pudieron embarcar nueve ecuatorianos, informó el jueves la Cancillería, que anotó que los siete restantes estarán incluidos en un segundo vuelo humanitario.
ECUATORIANOS ATRAPADOS
Jeaneth Mendoza, madre de Diego Moncayo, el estudiante ecuatoriano que está atrapado en una ciudad cerca de la frontera rusa, volvió a clamar este viernes por atención del Gobierno para rescatar a su hijo.
“Mi hijo ha vivido cosas fuertes, un bombardeo donde se salvó de milagro. Ya se salvó una vez, Dios le acompañó porque estuvo en cruce de balas en una población llamada Sumy. Él se encuentra solo, asilado en una casa de una amiga ucraniana, sin salida”, alertó.
Mendoza dijo estar “desesperada” porque tras la “luz” que vieron con el anuncio del corredor humanitario para la salida de civiles, no ha tenido respuesta de las autoridades para sacar a su hijo.
“Diego no puede salir solo. Está a 16 horas de la frontera en carro, caminando será una semana, diez días”, anotó al pedir ayuda.
“Por favor, no nos dejen solos, el canciller ha dicho que ningún ecuatoriano se va a quedar”, dijo entre lágrimas en un desgarrador audio al que Efe tuvo acceso. EFE