Autoridades del Gobierno y dirigentes del sector agricultor de la zona costera de Ecuador iniciaron este lunes un proceso de diálogo que busca poner fin a una protesta y dar solución a las demandas de organizaciones campesinas que exigen regular los precios internos del arroz y del banano, entre otros productos.
Las manifestaciones se concentraron en la mañana en la provincia costera de Guayas, cuya capital es Guayaquil (suroeste), donde grupos de campesinos bloquearon momentáneamente algunas vías, aunque con el pasar de las horas las acciones de protesta se suspendieron tras conocerse sobre el mecanismo de diálogo.
La protesta, aunque fugaz, fue la primera que soportó el Gobierno del presidente Guillermo Lasso, quien asumió el poder el pasado 24 de mayo.
Los productores bananeros se quejaron de que la caja de la fruta de 18 kilos, que según ellos debería tener un valor de 6,25 dólares, apenas llega a 2 dólares, por la presión de los exportadores de la fruta.
Asimismo, productores arroceros expresaron su malestar porque la saca del producto, de 90 kilos, se cotiza en entre 18 y 22 dólares, cuando el precio mínimo de venta debería ser de 29 dólares.
Los dirigentes arroceros achacaron la variación de precio al alto volumen de contrabando, sobre todo del producto que llega desde países vecinos como Colombia y Perú, por lo que también han pedido mejorar los controles para evitar el ingreso ilegal de la gramínea.
La ministra de Agricultura, Tanly Vera; el viceministro de Gobierno (Interior), Homero Castanier; y el gobernador de Guayas, Vicente Taiano, encabezaron el proceso de diálogo con los agricultores.
Richard Intriago, presidente del Movimiento Nacional Campesino, que participó en la mesa de diálogo, indicó que luego que el Gobierno aceptó dialogar, se suspendió la medida de presión.
Intriago dijo que el Gobierno se comprometió a atender sus demandas “lo más pronto posible”, pero aseguró que si no lo hace, los campesinos volverán “a las calles y carreteras del país” para reclamar por “los derechos del sector agropecuario, un sector demasiado golpeado en el país” por la crisis económica y los efectos de la pandemia del coronavirus.
De su lado, la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie), la organización social más importante de Ecuador, anunció su respaldo al sector agropecuario de la costa.
La Conaie, por otra parte, recordó en un comunicado que también un grupo del magisterio ecuatoriano ha decidido efectuar una “huelga de hambre” en las inmediaciones de la Asamblea Nacional (Parlamento) en defensa de sus derechos y de la educación pública.
El presidente de la Conaie, Leonidas Iza, finalmente pidió al Gobierno que congele los precios de los combustibles, cuyo valor de venta al público se eleva cada mes, por un decreto aprobado en plena pandemia por el expresidente Lenín Moreno, antecesor de Lasso. EFE