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Netflix ha dejado claro que solo pueden usar una cuenta abierta en su servicio las personas que viven en el mismo hogar, y que en caso de detectar que no se cumple este requisito, el próximo año empezará a cobrar al usuario un importe adicional.

La compañía tecnológica dedica a la compartición de cuentas un apartado en su página de Ayuda, en donde deja claro que las personas que no vivan en en el mismo hogar “tendrán que usar su propia cuenta para ver Netflix”.

La compañía verifica el requisito del hogar a través de la dirección IP, los identificadores de los dispositivos y la propia actividad de la cuenta. Con esta información, Netflix puede saber si se está usando la conexión a Internet del hogar del titular de la cuenta.

En el caso de que el usuario se conecte desde otra red, o desde un dispositivo distinto fuera del hogar, por ejemplo, porque está de viaje, la compañía realizará una verificación del dispositivo, para comprobar que está autorizado a usar dicha cuenta.

La finalidad es de todo esto es evitar que otros usuarios, aunque se trate de amigos o familiares, utilicen una misma cuenta, un fenómeno que en los últimos años ha permitido compartir gastos, por ejemplo, activando una cuenta que admite el uso simultáneo de cuatro dispositivos, cuyo coste (17,99 euros) se puede repartir entre cuatro personas.

Netflix es tajante en este aspecto: “Solo las personas que viven contigo pueden usar tu cuenta”. Y si detecta la compartición, avisa de que cobrará al titular un extra, como ya ha probado en Chile, Costa Rica y Perú, a modo de subcuenta. Esta aproximación comenzará a implementarse en todos los países a principios de 2023, como ha informado la compañía en los resultados financieros del tercer trimestre.

También matiza que dicho cobro no será automático. Para dar opciones a los usuarios, ha anunciado recientemente la posibilidad de transferir los perfiles configurados a una nueva cuenta. Aunque también permitirá crear ‘subcuentas’ para miembros extra, pagando una cantidad adicional.

Actualmente, Netflix ofrece tres planes de suscripión: Básico (7,99 euros), Estándar (12,99 euros) y Premium (17,99 euros), que admiten el uso de la cuenta en uno, dos y cuatro dispositivos de forma simultánea, además de mejorar de forma progresiva la calidad de la imagen.

El próximo 10 de noviembre esta oferta se ampliará con el plan Básico con anuncios, que costará 5,49 euros al mes a cambio demostrar una media de cuatro o cinco minutos de anuncios por hora, que se verán al principio de las series y películas y durante su reproducción.