El impacto a nivel mundial de la música de Rosalía es de sobra conocido, pero hay otra joven española que lleva los últimos 4 años girando por Europa, Asia y América en un fenómeno sin precedentes: su nombre es Bad Gyal y acaba de consagrarse en EE.UU. como una de las grandes figuras del ‘dancehall’ internacional.
Con un nombre artístico que en castellano significa chica mala, esta barcelonesa pasó de trabajar en una panadería de Vilasar de Mar (España) a dar conciertos en Japón, Alemania y Estados Unidos, donde se ha presentado esta semana como uno de los principales reclamos de la primera edición del festival Primavera Sound en Los Ángeles (EEUU).
Aupada por su versatilidad para adaptarse a ritmos tan populares como el ‘dancehall’, el reguetón, el ‘dembow’ o el ‘trap’ y con solo 25 años, Alba Farelo i Solé, nombre real de la artista, ha llegado a la cita tras grabar con reputados productores como Scott Storch, con cinco discos de platino, uno de oro y hasta una decena de millones de oyentes mensuales sumando las reproducciones de plataformas como YouTube o Spotify.
“Mi público en todo el mundo es el mismo: gente joven a la que le gusta la música para pasarlo bien y salir a bailar”, concretó Bad Gyal en una entrevista con Efe en Los Ángeles.
La realidad es que de un tiempo a esta parte se ha convertido en una fábrica de éxitos musicales que se repiten una y otra vez en las discotecas, sobre todo de España y de Latinoamérica, para deleite de fans admiradas por unas letras muy enfocadas al empoderamiento de la mujer y a la libertad sexual femenina.
Parte de una nueva generación de jóvenes baila ahora temas como “Flow 2000”, “Su Payita (Gramos)”, “Fiebre” o “Nueva York (Tot*)” en la red social TikTok con la autoestima suficiente para no avergonzarse de su cuerpo debido al ‘qué dirán’ o a las convenciones sociales. Algo que, en buena medida, es gracias a su música.
“Yo soy una mujer que se expresa sin tapujos y sin miedo a que me puedan juzgar, pero ha sido el discurso de rebeldía de otras anteriormente lo que ha provocado que ahora haya menos prejuicios cuando se habla de ciertos asuntos”, explicó esta artista que ha cantado en español, catalán e inglés durante los últimos años.
Si bien sigue habiendo muchos temas tabú para las mujeres, incluso en géneros dirigidos a público joven, y Bad Gyal apuesta por un mensaje rompedor en sus composiciones, en las que no duda en hablar de chicas que consumen drogas cuando salen de fiesta o de relaciones y preferencias sexuales en un tono altamente explícito.
“Lo que más incomoda a un hombre es una mujer que no sigue un canon establecido”, afirmó Bad Gyal para añadir que su posición, la de “una chica rubia, blanca y delgada”, es “privilegiada” para tratar estos temas.
Su empuje coincide con el de figuras como la dominicana Tokischa o la puertorriqueña Villano Antillano, quienes también están sacudiendo la escena de la música urbana en español con canciones que incluyen referencias a la comunidad LGTBIQ+ y están permitiendo normalizar la diversidad entre los jóvenes.
“Aún se acepta mucho más a dos mujeres lesbianas que siguen el prototipo de belleza normativo que a dos personas ‘queer’, negras y dominicanas”, criticó la estrella.
“Ellas son mucho más valientes que yo, te lo aseguro”, enfatizó la cantante, que próximamente actuará en Brasil, Argentina y México.
Después de colgar el cartel de ‘no hay billetes’ en sus conciertos de Nueva York y Los Ángeles, Bad Gyal está a punto de cerrar la temporada de verano con un nuevo sencillo, aún sin título, que acompañará a sus exitosos temas “La Prendo” y “Sexy”.
Mientras tanto, Bad Gyal promete seguir poniendo a bailar a jóvenes alrededor del mundo con canciones irreverentes “inspiradas en mujeres que se atreven a hacer lo que les apetece, aunque las juzguen por ello”.