Las cantantes mexicanas Paulina Rubio y Alejandra Guzmán prometieron que en la gira “Perrísimas”, que las llevará por más de 20 ciudades de Estados Unidos, dejarán atrás sus egos e histórica rivalidad y los transformarán en la energía que ha caracterizado sus carreras.
“Nos detonamos nada más vernos, tenemos mucha fuerza y nos compenetramos”, dijo Paulina Rubio en la presentación del tour por los Estados Unidos en el Hard Rock Hotel, de Hollywood (Florida).
Porque, como aseguró la llamada “Chica Dorada”, ya tienen cierta edad, Paulina tiene 50 años y Alejandra Guzmán, 54, y ya son “grandes” como para no darse cuenta de que “el ego es el oponente”.
“Esto es un ‘business’ (negocios)…Somos dos mujeres muy profesionales haciendo un momento de ‘honor a quien honor merece’, que es el público”, dijo Paulina a Efe, consciente de que llevar esa rivalidad a un escenario “va a dar mucho de qué hablar”.
Recalcó que sobre el escenario de “Perrísimas” habrá mucho más allá del “morbo” de ver juntas a “dos fieras en el lodo”, habrá un “catálogo muy extenso, de mucho trabajo”.
DEJÁS ATRÁS EL PASADO
Alejandra Guzmán, que tuvo que participar en la presentación por videoconferencia por problemas de visado para entrar a EE.UU., coincidió con ella y dijo que le “motiva dejar atrás el pasado” y que, al final de cuentas, tienen “muchas cosas en común” y se conocen desde hace décadas.
Producida por las propias cantantes, la gira comenzará el 15 de abril en Orlando (Florida) y tiene confirmadas más de 20 fechas en los Estados Unidos, incluidas paradas en Nueva York, Miami y Las Vegas, antes de echar el cierre el 22 de mayo en Los Ángeles.
Las dos estrellas han protagonizado sonoros enfrentamientos que llegaron incluso a hacerse música en “Mío” y “Hey Güera”, canciones resultado del triángulo amoroso entre las dos mexicanas y el también músico y actor Erik Rubin, entonces pareja de Guzmán y que tuvo un romance con Paulina, compañera en Timbiriche.
Y no es el único exnovio que compartieron, tal y como recordó la cantante de “Yo no soy esa mujer”.
Pero la llamada Chica Dorada aseguró que todo eso quedó atrás y ahora sí podrán salir juntas en gira, algo que en el pasado ya se intentó, pero que no terminó de cerrarse, y las diferencias del pasado son historia y ahora sumarán sus energías no para atacarse sino para deslumbrar a la audiencia.
UNA CANCIÓN JUNTAS
Las consideradas reinas del pop y del rock latino, Paulina y Guzmán, respectivamente, unirán géneros en una gira que busca “romper el molde” de su rivalidad, alimentada por su entorno y por ellas mismas.
Como muestra de que los egos están controlados, aseguraron que se alternarán para abrir y cerrar sus conciertos y la sintonía es tal que anticipan que durante la gira, como “gitanas por la música”, es posible que salga una futura canción juntas que muestre su “garra” y, al mismo tiempo, que son “como aceite y agua”.
Todo podría surgir en la gira y, de hecho, Paulina advirtió con “no parar en mucho tiempo” y llevarla también a México a partir de septiembre, el “mes de la fiesta” en su país natal, con algo “más potente” que en EE.UU. y “mucho más extensa”.
“Dos mujeres como nosotras no se dan todos los días y mucho menos se juntan para dar una buena faena”, dijo Paulina Rubio.
Sin embargo, Alejandra Guzmán puntualizó en declaraciones a Efe que es algo que está todavía por ver porque ella ya tiene otros compromisos.
La hija de Enrique Guzmán y Silvia Pinal ya sabe cómo manejarse en este tipo de situaciones, después de la gira por los EE.UU. que realizó en 2017 con otro de los grandes nombres de la música mexicana, Gloria Trevi.
Y ahora las reinas del pop y del rock latino prometen ser fieles al nombre de la gira, “Perrísimas”, que para Guzmán simboliza la “rebeldía, el sabor, las ganas y el pedigrí” que ha marcado su carrera y para Paulina Rubio el “ser auténtica”. EFE