Un nuevo motín registrado este lunes, esta vez en una prisión de Quito, concluyó sin que se registraran heridos y tras una intervención policial, confirmaron a Efe fuentes del Servicio penitenciario.
“La situación está controlada, no se registran heridos”, precisó un funcionario de la unidad de Comunicación del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de la Libertad (SNAI).
La autoridad penitenciaria precisó en un mensaje emitido por redes sociales que la situación fue controlada tras la intervención de un contingente de la Policía.
La Policía Nacional emitió poco antes un comunicado en el que aseguraba que “ante incidentes en el Centro de Detención Provisional El Inca, en Quito, nuestras unidades operativas se han desplegado, a fin de mantener el control en este recinto carcelario”.
De momento, se desconoce qué motivó este motín y cuántos efectivos fueron despachados al centro de detención para aplacar un suceso que se enmarca en un estado de excepción en todo el sistema penitenciario declarado por el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, el pasado 29 de septiembre.
Por otra parte, la Fiscalía General del Estado informó este lunes de que ha iniciado de oficio una investigación por la muerte de 7 personas privadas de libertad, que fueron encontradas ahorcadas en el interior del pabellón 10 de la Penitenciaría del Litoral en Guayaquil (suroeste).
Este sábado, el SANI informó que investigaba el presunto “suicidio” de 7 reos en dicha prisión, donde el 28 de septiembre se registró una masacre que dejó al menos 118 muertos y 79 heridos en una reyerta atribuida a bandas rivales vinculadas al narcotráfico.
El hallazgo de los cadáveres de los siete reclusos se suma a otros cuatro encontrados en similares condiciones el pasado 14 de octubre en el mismo centro penitenciario.
A la crisis carcelaria, que este año deja un saldo sin precedentes de 250 presos asesinados, se suma la creciente inseguridad ciudadana, que ha llevado al presidente a declarar el lunes pasado un estado de excepción en varias provincias del país para hacer frente a la criminalidad.
El último y dramático caso que ha provocado conmoción social y especialmente en el mundo del deporte, ha sido el asesinato el viernes pasado en Guayaquil del atleta ecuatoriano Alex Quiñónez, finalista en los 200 metros en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. EFE