Desde el pasado 18 de julio no hay pistas de Gislaine Guadalupe Ortiz Rodríguez, conocida como ‘Lupita’, la niña de 2 años desaparecida en el recinto Topadero, de la parroquia El Rosario, en El Empalme.
Desde ese día, sus familiares, amigos, la Policía y la comunidad de El Empalme realizaron acciones de búsqueda sin que hasta el momento haya pistas de su ubicación.
Los agentes investigadores decomisaron los celulares de algunos familiares de la menor para poder realizar un peritaje y obtener información sobre lo que pudo haber ocurrido; además al primo de la niña, de 13 años, y su tío, un hombre de 34, quienes fueron los últimos que vieron a ‘Lupita’, fueron sometidos a exámenes toxicológicos.
Ante la falta de ‘resultados’, se siguen colocando los afiches de la menor en varios sectores de El Empalme y cantones aledaños con la esperanza de poder hallarla.
La tarde del 18 de julio, el día de la desaparición de ‘Lupita’, la niña estaba a cargo de su primo, poco antes, Jennifer Rodríguez, madre de la menor, había salido de su casa junto a su esposo y su suegro; ellos se dirigieron hasta el cantón Pichincha (Manabí) a comprar una motocicleta, mientras que Jennifer fue al colegio donde estudia.
Horas después, a las 16h00, le comunicaron sobre la desaparición de la pequeña. El adolescente de 13 años que estaba a cargo de la menor dijo que mientras le daba de comer a la niña llegó a visitarlo su padre, un hombre de 34 años, luego ambos se habían quedado dormidos y al despertar la pequeña ya había desaparecido.
A la búsqueda de ‘Lupita’ se han unido varias instituciones del Estado, además de la Policía, con la finalidad de obtener pistas y conocer qué realmente sucedió con ella.