El cacao, ese pequeño grano de múltiples propiedades y materia prima de mil usos, trasciende el ámbito culinario, alimenticio o cosmético para convertirse en un agente de conservación forestal en Ecuador.
Además de ser el primer exportador de cacao en grano de América, Ecuador se convirtió este año en el pionero de la exportación de cacao orgánico fino de aroma libre de deforestación.
“PEPA DE ORO” EN LUCHA CONTRA EL CAMBIO CLIMÁTICO
Conocido como la “Pepa de oro”, el cacao es uno de los principales productos tradicionales de exportación de Ecuador, cultivado principalmente por pequeños productores.
El 80 % de los cultivos se concentran en las provincias de Guayas, Los Ríos, Manabí, Esmeraldas, El Oro y Santa Elena, mientras que el resto se distribuye en las de Chimborazo, Bolívar, Cotopaxi, Pichincha, Azuay, Sucumbíos, Orellana, Napo y Zamora Chinchipe.
Precisamente la Asociación de Pequeños Exportadores Agropecuarios Orgánicos del Sur de la Amazonía Ecuatoriana (APEOSAE), ubicada en Zamora Chinchipe, exportó en enero pasado 3,8 toneladas de cacao libre de deforestación a Bélgica.
La producción y el envío se concretó gracias a los ministerios de Agricultura y de Ambiente que, con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), ejecutan el Programa Integral Amazónico de Conservación de Bosques y Producción Sostenible (PROAmazonía).
Para afrontar el cambio climático -específicamente la deforestación y degradación de los bosques-, PROAmazonía realiza acciones para transformar los sistemas de producción en modelos más eficientes y sostenibles, que reduzcan la presión sobre los recursos naturales.
Así, en Zamora Chinchipe trabajó con 38 productores dueños de 347 hectáreas, de las cuales 106 corresponden a bosque nativo en conservación.
A ellos, les facilitó asistencia técnica y acompañamiento para implementar buenas prácticas agropecuarias, utilizó tecnología accesible para uso en teléfonos celulares y un aplicativo de código abierto para realizar el mapeo de las fincas de donde salió el cacao libre de deforestación exportado a Bélgica.
NUEVAS OPCIONES
Ese primer cargamento piloto para la firma belga “Silva Cacao” -dedicada a obtener granos de cacao de la más alta calidad en el mundo- ha derivado en una promesa de compra de otras siete toneladas de cacao.
Además, abrió negociaciones para otros productos, como café libre de deforestación con la firma “Lavazza”, de Italia, reveló a Efe Kathya Ortiz, de PROAmazonía.
“Mejorando la calidad y el rendimiento en los sitios productivos actuales a través de capacitaciones, escuelas de campo, estrategias de asociatividad y vinculación comercial, evitamos que se siga expandiendo la frontera agrícola”, explicó.
Eje fundamental -añadió- es la certificación y los sistemas tecnológicos (trazabilidad) a fin de que los compradores conozcan el origen y la evolución del producto en cada una de sus etapas de poscosecha, uno de los requisitos que implementa la Unión Europea (UE) para sus compras.
INTERCAMBIO REGIONAL
El Sistema de Trazabilidad es una iniciativa desarrollada con el apoyo del Comité Europeo para la Formación y la Agricultura (CEFA), el Ministerio de Agricultura y la Cooperación Alemana (GIZ), en el marco de un programa financiado por la UE, que permite organizar información de productos, de asociaciones de productoras agrícolas y sus centros de acopio a fin de trazar su cadena de producción desde el acopio hasta su venta.
La información que registra este sistema de trazabilidad incluye referencias del productor, información socioeconómica y ubicación de la finca o parcela destacando los datos de libre deforestación desde 2014.
Ello “con la finalidad de identificar áreas agrícolas que no han talado bosque para aumentar su producción y calificarse como producción de libre deforestación”, dijo a Efe Ramiro Jaramillo, gerente de MJTEC, empresa que creó el software de trazabilidad.
Precisamente Jaramillo, delegados del Ministerio de Agricultura y de PROAmazonía compartirán, entre mañana y el jueves en Bogotá (Colombia), sus experiencias en el evento “Intercambio regional de herramientas de monitoreo de deforestación en la producción de cacao amazónico”.
“Podemos trabajar en conjunto para generar productos de calidad y amigables con el ambiente”, aseveró el gerente de MJTEC, convencido de la importancia de expandir mecanismos de conservación forestal “de manera sencilla y accesible para todos”. EFE