La Corte Provincial de Santa Elena revocó este viernes 20 de mayo del 2022, el polémico habeas corpus otorgado al exvicepresidente Jorge Glas en abril, que permitió su salida de prisión, y ordenó su captura inmediata para que continúe cumpliendo su pena de prisión por dos delitos de corrupción.
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El dictamen resolvió, de manera unánime, declarar la nulidad de todo lo actuado por el juez de la Unidad Judicial Multicompetente de Manglaralto, que resolvió en favor de Glas, por falta de competencia territorial para tramitar el habeas corpus.
El fallo, al que ha tenido acceso Efe, indica que el tribunal que resolvió la acción de protección en favor del exvicepresidente, causó indefensión al Estado al no notificar a la Procuraduría (Abogacía) General del Estado.
Por tal motivo, la sentencia dispone la localización y captura inmediata de Glas para que reanude su pena en la cárcel de Latacunga, en la provincia andina de Cotopaxi, en cumplimiento de sus condenas de seis y ocho años de prisión por asociación ilícita y cohecho, respectivamente.
Además de pedir a la Comandancia General de la Policía Nacional el cumplimiento de la sentencia, independientemente de cualquier acción o recurso legal, la Corte de Santa Elena también exigió a la Fiscalía General que investigue la actuación de los funcionarios que hayan intervenido en el trámite del proceso aludido.
La sentencia declara, además, la existencia de un “error inexcusable” y da paso al inicio del correspondiente sumario administrativo del caso.
El miércoles se inició la audiencia de revisión del polémico habeas corpus concedido a Glas que este viernes concluyó con la sentencia de revocatoria.
El procurador general del Estado, Íñigo Salvador, alegó que la Procuraduría no fue citada ni convocada a la diligencia del habeas corpus, y que el servicio penitenciario (SNAI) carece de personería jurídica, lo que dejó al Estado en indefensión, razón por la que pidió que se revocara la sentencia.
Antes de ser liberado el 10 de abril, el exvicepresidente, de 52 años, llevaba en prisión desde finales de 2017.
Pese a que uno de los argumentos de la defensa Glas fue su delicado estado de salud, al salir de prisión el exvicepresidente inició una gira con sus seguidores que pasó por diferentes ciudades de Ecuador hasta llegar a su natal Guayaquil, donde podía moverse con libertad con la obligación de presentarse mensualmente ante un juez.
Glas fue vicepresidente durante el Gobierno de Correa (2007-2017) y también, por pocos meses, de su sucesor, Lenín Moreno (2017-2021).
La defensa del exvicepresidente ha alegado, al igual que suele hacerlo el propio Correa, prófugo de la Justicia ecuatoriana, que su condena forma parte de una persecución política. EFE
