La construcción del puente en la vía Montecristi-Jipijapa, a la altura de la comunidad Quimís, debe ser atendida con prioridad para garantizar el tránsito por esta carretera que se prolonga para unir a Manabí con Guayas.
Ha transcurrido año y medio desde que el puente de hormigón armado colapsó en Quimís.
Después de esto, se prometió que se lo restablecería de urgencia, y que antes se instalarían dos puentes metálicos, uno por cada carril, de manera provisional, que deben soportar el paso de pesados vehículos, muchos de ellos con voluminosas cargas.
Para garantizar el paso inmediato se construyeron dos variantes en el lecho del estero.
“El puente permite el paso entre Manabí y Guayas, por lo que se vuelve urgente construirlo”.
Después, se ha cambiado el discurso. Ahora se asegura desde el sector oficial que el puente será considerado en una posible concesión de la vía Montecristi-La Cadena con un consorcio español; pero de esto ni siquiera hay estudio, mucho menos plazos.
Lo único que hay es una carta de intención. El pretexto es que se puede construir el puente, pero el posible concesionario podría modificarlo después.
Se debe considerar, además, que hay otros puentes en Manabí que necesitan reparación, mantenimiento o reconstrucción, pero que han sido poco tomados en cuenta, a pesar de los informes que han hecho desde los mismos entes gubernamentales.
Editorial de El Diario publicado este lunes 27 febrero del 2023 en nuestra edición impresa.
