La cifra de 16 asesinatos diarios como promedio, en el país, debe motivar la suficiente preocupación de las autoridades y los representantes de la ciudadanía.
Y, en consecuencia, llevar a la toma de decisiones fuertes.
El Gobierno acaba de declarar, por tercera vez en menos de un año, el estado de excepción en la provincia de Esmeraldas.
Eso debido a la situación de inseguridad que vive esa jurisdicción que, según los reportes oficiales, sufre un incremento de actos violentos, sobre todo, por su cercanía con Colombia.
Sin embargo, en la práctica se ha demostrado que este tipo de medidas no surte efecto pues, a la postre, ni siquiera se asignan los recursos que se necesitan para intervenir con severidad y sin limitaciones.
“Debería pensarse en medidas diferentes y más efectivas”.
Debería pensarse en medidas diferentes y más efectivas porque si los estados de excepción no son contundentes, los resultados serán siempre los mismos.
Se saluda la iniciativa del Presidente de la Corte Nacional de Justicia de convocar a los poderes del Estado a hacer mesa de trabajo para servir al país.
Es de esperar que se establezcan estrategias de trabajo conjunto.
Estrategias que conduzcan a cambios legales y que se coordinen las acciones.
Eso para que, siendo la inseguridad una preocupación nacional, los esfuerzos no aparezcan aislados.
Editorial de El Diario publicado este lunes 6 de marzo del 2023 en nuestra edición impresa.
