¿Su nombre completo y especialidad?
Priscila Feijó Cuenca. Soy especialista en emprendimiento, formadora de formadores de la ESPOL, becaria del Gobierno de Israel en innovación y emprendimiento, y mis tesis doctorales están enfocadas en estos temas.
¿Las ferias garantizan el éxito para los emprendedores?
No. Son una herramienta de promoción mínima, que emociona, sí, pero no genera réditos económicos. Ni asegura el acceso real al mercado.
¿Cuál es el problema de fondo?
Que no todos los productos son para todos los públicos. Cada producto tiene un mercado objetivo, pero las ferias agrupan públicos muy diversos. Eso limita las posibilidades reales de venta.
Falta organización
¿Falta planificación en la organización?
Muchas veces no son los emprendedores quienes organizan, sino entes públicos o privados. Ellos deberían garantizar que al evento asista un público comprador. Y eso no siempre ocurre.
¿Qué otros factores afectan su efectividad?
La esporadicidad. Un emprendedor necesita continuidad para sostener su negocio. Vender solo en ferias, tres o cuatro veces al año, no asegura ni la subsistencia del negocio ni la del emprendedor.
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¿Conoce casos que no hayan sido exitosos?
Muchos. He visto ferias mal difundidas, sin público. Y los emprendedores terminan perdiendo dinero, tiempo y esfuerzo. Además, suelen ser los mismos grupos los que repiten sin crecer económicamente.
¿Las ferias deberían ser gratuitas?
Por supuesto. No se debería cobrar al emprendedor. Ya invierte en su espacio, transporte y alimentación. Cobrar por el stand convierte a la feria en un negocio más, no en una actividad de apoyo.
¿Por qué a veces se declara una feria como “exitosa” aunque no lo sea?
Porque entre emprendedores se compran productos entre sí. Es una ilusión. Venden, pero también gastan en otras mesas, lo cual no genera rentabilidad real.

¿Qué se necesita para mejorar las ferias en Manabí?
Preparar al emprendedor, promover productos más allá del stand, invitar compradores reales, conectar con sectores comerciales, hablar de volúmenes, precios justos y capacidades de producción. Y sobre todo, garantizar asistencia.
¿Y sobre los precios elevados en ferias?
Si son gratuitas, debe haber regulación para precios accesibles. Pero si al emprendedor se le cobra por participar, se ve obligado a subir precios para recuperar la inversión. Por eso, hay que pensar bien cómo se estructuran.