La selección brasileña suma y sigue. Sin esforzarse demasiado y con otro gol de Neymar, los anfitriones doblegaron este jueves por 4-0 a Perú y encauzaron su pase a cuartos de final, en la segunda jornada del grupo B de la Copa América 2020.
Dos partidos, dos victorias y la sensación de que nadie puede hincarle diente. Con un césped en mal estado, la Canarinha derrotó a medio gas al combinado blanquirrojo como ya hizo en la final de la edición de 2019.
El lateral Alex Sandro abrió la lata en el minuto 12, Neymar amplió en el 68 y, con Perú ya abatida, Everton Ribeiro, en el 89, y Richarlison, en el 93, cerraron la goleada en el estadio Nilton Santos de Río de Janeiro.
El cuadro de Ricardo Gareca controló la posesión en algunos tramos del encuentro, pero se mostró completamente improductivo en ataque en su estreno en el torneo.
Brasil lidera ahora el grupo B con seis puntos, dos más que Colombia que este jueves empató sin goles con Venezuela. Perú es colista junto con Ecuador, ambos en blanco y con un partido menos. Los cuatro primeros pasan a la ronda de cuartos.
Tite puso en liza un once con seis cambios respecto al triunfal debut contra Venezuela (3-0). La Copa América interpretada como un gran laboratorio de pruebas para la Canarinha, que pese a los experimentos sigue intratable.
Sorprendió el seleccionador porque además plantó una línea de cuatro atacantes con Everton ‘Cebolinha’, Gabriel Jesus, Gabigol y Neymar, inamovible para Tite, imprescindible para las aspiraciones de Brasil.
Se avecinaba vendaval, aunque en la primera mitad no lo pareció. De hecho, el combinado peruano conectó con relativa facilidad en el centro ante la aparente pasividad de los anfitriones.
Pero lo cierto es que poco tuvo que hacer Brasil para ponerse por delante en el marcador. Avisó primero con un disparo lejano de Fred y en la siguiente jugada anotó el primero por medio de Alex Sandro.
Centro desde la izquierda de Everton Cebolinha, Gabriel Jesus recibe después de un desvío de la zaga blanquirroja y mete el balón al corazón del área para el remate de primeras del lateral del Juventus. Demasiado fácil.
Con el viento a favor, Brasil bajó revoluciones y cedió la posesión al cuadro de Gareca. Agazapado, esperó al contragolpe y quedó a merced de las florituras de Neymar, que sufrió con las faltas de los visitantes.
Pero el subcampeón de la última Copa América apenas incomodó a Ederson.
Solo presentó peligro en un disparo de larga distancia de Tapia y en una jugada peligrosa de Cueva, perdonado tras ser sorprendido en una fiesta horas antes de unirse a la concentración en plena pandemia de coronavirus, que desaprovechó Yotún.
Brasil, casi sin quererlo, rondó el segundo en una arrancada de Neymar que finalizó en la corona del área Alex Sandro. Esta vez su disparo se marchó alto. Antes, Fabinho también lo intentó desde fuera del área.
En el descanso, Tite introdujo dos cambios en busca de un mayor control del juego. Metió al creativo Everton Ribeiro y al atacante Richarlison por ‘Cebolinha’ y ‘Gabigol’. El equipo mejoró de forma notable.
Sin embargo, seguía sin llegar el gol de la tranquilidad. Neymar intentó engañar al árbitro al tirarse a la piscina tras un leve contacto de Tapia. Patricio Loustau decretó penalti, pero el VAR le corrigió.
La decisión azuzó al delantero del París Saint-Germain, pues menos de diez minutos después recibió un balón a la entrada del área, se acomodó y lanzó cruzado, raso, para anotar el segundo de la noche.
Dejarle espacios al camisa 10 es un pecado mortal y fue lo que hizo Christian Ramos. Error fatal.
Perú pudo recortar distancias en los últimos minutos en una ocasión clarísima, a pocos metros de la línea gol, que mandó a las nubes Valera, que había salido desde el banquillo.
En los minutos finales, Perú bajó los brazos y Brasil lo aprovechó para anotar dos más por medio de Everton Ribeiro, en una jugada en la que también intervino Neymar, y Richarlison.
Victoria contundente para afirmarse como el principal favorito de esta controvertida Copa América.