En las instalaciones del cementerio general de Portoviejo se registra movimiento.
Varias personas acuden a visitar a su ser querido previo al Día de la Madre que se celebra el domingo.
En las afueras del camposanto también se han instalado algunos comerciantes para vender flores, velas y refrescos.
Quienes han llegado al cementerio aprovechan la mañana para limpiar las bóvedas de sus familiares.
Pese a esto las personas que se dedican a pintar tumbas mencionan que no les está yendo bien por la crisis económica que ha provocado la pandemia.