El Zoológico de Quito anunció este viernes el fallecimiento de Pablo, a sus 27 años, el más longevo oso andino de ese parque y ejemplar de una de las especies emblemáticas de la región, que son protegidas por el frágil ecosistema en el que habitan.
“Hoy despedimos a Pablo, el oso más viejito que vivía en el Zoo de Quito. A sus casi 27 años, este oso andino murió debido a vejez”, indicó a través de Twitter el también conocido como Zoo de Guayllabamba.
Los responsables de la institución subrayaron, además, que “el aporte de Pablo a la conservación de su especie lo ha convertido en un hito en las acciones de protección de los osos andinos”.
El parque zoológico rindió tributo al animal al destacar que permitió que los osos en vida silvestre fueran monitoreados con collares de rastreo satelital que se crearon gracias a sus medidas, “sus heces se utilizaron en la rehabilitación de osos rescatados y muestras de su ADN llevaron a implementar estrategias de detección de osos silvestres”.
Asimismo, contribuyó a la puesta en marcha de varios proyectos de investigación para la conservación de esta especie en peligro de extinción, y fue una pieza clave en procesos de educación y sensibilización para cuidar y conservar al oso andino.
La Fundación ambiental Jocotoco advirtió en septiembre pasado sobre la importancia de mantener la conexión de los bosques en Ecuador tras haber captado la presencia de un cachorro de oso andino en la reserva de Narupa, situada en la región Amazónica de la nación.
Cámaras trampa grabaron al oso andino deambulando dentro de la reserva, creada en 2006 y que comprende 1.802 hectáreas, de bosque verde y clima lluvioso y templado.
De esta forma, la Fundación corroboró “la importancia de seguir conectando los bosques fragmentados y creando corredores naturales, de manera que podamos resguardar suficientes áreas de bosque para que le brinden un refugio seguro a las especies amenazadas”.
La población actual del oso andino está en riesgo debido a la pérdida de las zonas arbóreas en las que vive y la caza furtiva.
Expertos calculan que en Ecuador hay unos 3.000 individuos de osos andinos o de anteojos (por el antifaz de otro color en el rostro), una pequeña porción de los 20.000 que se calcula habitan en los Andes suramericanos y que también están presentes en montañas de Venezuela, Colombia, Perú, Bolivia, Chile y Argentina. EFE