El país necesita que se genere un clima de confianza en el ámbito económico para estimular la inversión privada, que en los últimos años se ha visto afectada por las decisiones políticas, la incertidumbre y la pandemia.
Hay que reactivar la economía y para ello deben dictarse normas que flexibilicen las condiciones de inversión.

La generación de empleo también requiere reglas modernas y menos rígidas, acorde con la dinámica actual.
Lamentablemente, las expectativas no son halagadoras.

Después de un año recesivo, se prevé un tímido crecimiento de la economía en el 2,8 por ciento, según las proyecciones más optimistas, pues algunos organismos internacionales estiman un aumento de apenas el 1 % para el producto interno bruto.

El país muestra índices bajos de recuperación desde hace algunos años”.


No obstante, el país viene mostrando índices parecidos desde hace algunos años. Las políticas restrictivas y la confrontación ideológica no solo llevaron a una reducción del comercio exterior, sino que restaron impulso a muchos de quienes habían visto en Ecuador una plaza para sus negocios.

El Gobierno debe dar ese espaldarazo de confianza que necesita la inversión. Es necesario que lo dé, para empujar con ello la recuperación del país.

Editorial de El Diario publicado este domingo 6 de junio del 2021 en nuestra edición impresa.