La Fiscalía Nacional debe intervenir la investigación que se realiza en la provincia sobre los dos incendios consecutivos que se registraron el año pasado en una bodega y una oficina, ambas del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, en Portoviejo.
Por lo que se sabe, la investigación prácticamente ha quedado archivada y, con ello, se ha burlado a los afiliados, pues es con sus aportes que se financia a esa institución.
No se entiende por qué no se ha podido determinar, un año después, ni el tipo de bienes ni el monto de lo que se perdió. Y si existen tales datos, por qué se mantiene en reserva una información que por su naturaleza debería ser pública, a menos que se pretenda esconder algo.
“El secretismo en torno a este caso lo único que hace es despertar suspicacias”.
El secretismo en torno a este caso lo único que hace es despertar suspicacias, por lo que es necesario que se investigue exhaustivamente qué fue lo que ocurrió. La comunidad necesita respuestas que no pueden lograrse con el cierre de un caso que, a todas luces, está inconcluso.
La Fiscalía Nacional ha intervenido en otras ocasiones casos en los que la investigación no avanza como debería. Es preciso que haga lo mismo con los dos incendios del IESS.
Editorial de El Diario publicado este viernes 27 de mayo del 2022 en nuestra edición impresa.
