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Es saludable recordar las gestas cívicas que sirvieron para reivindicar a Manabí, como la que impulsaron la Confederación Obrera Provincial de Manabí y las fuerzas vivas de la provincia, en 16 de julio de 1962, que derivó en la creación del CRM.

La historia recoge nombres como los de Lutero Santana, Sixto Américo Guillén, Gregorio Pita, Félix Véliz, Carlos Cedeño, José Cabrera Chinga y otros protagonistas de esta gesta que llevó a la creación del Centro de Rehabilitación de Manabí y el inicio del Plan de Manejo Hídrico con la construcción de la represa Poza Honda.

La provisión de agua significó un cambio en la calidad de vida de los manabitas.

La mejor forma de honrar a los impulsores de esta gran paralización es construyendo lo de falta del plan hídrico.

“Es indispensable que se construyan obras hídricas en la provincia”.

La prefectura, los legisladores, las fuerzas vivas, los gremios, las universidades; en fin, la sociedad, deberían organizarse y poner en la agenda el debate público sobre este tema, como punto de arranque para gestionar la ejecución de las obras.

Manabí, por su configuración geográfica, carece de fuentes permanentes de agua; por eso, es indispensable que se construyan obras para garantizar la supervivencia.

Penosamente, se ha perdido el liderazgo y los gobiernos han hecho poco en este sentido. Manabí debe insistir.

Editorial de El Diario publicado este sábado 16 de julio del 2022 en nuestra edición impresa.