El lateral Alan Ruschel, uno de los tres futbolistas que sobrevivieron a la tragedia aérea que sufrió el Chapecoense en 2016 en territorio colombiano, demandó ante la Justicia laboral al club brasileño, según anunció este jueves su abogada.
Ruschel, que el miércoles fue presentado como nuevo refuerzo del América de Belo Horizonte, equipo que disputará esta temporada la Primera División, interpuso el mismo día una acción judicial contra el Chapecoense por daños morales, salarios atrasados, derechos de imagen y demora para recibir el seguro por el accidente de 2016.
“El accidente fue en 2016 y las familias recibieron (el valor del seguro) cinco días después. Ya Alan solo lo recibió en 2019 porque se la pasó haciendo pericias” exigidas para cobrar el dinero, comentó al portal UOL Esporte la abogada Marijú Ramos Maciel, famosa por representar a varios jugadores en Brasil y otros países.
El club de la sureña ciudad de Chapecó, en el estado de Santa Catarina, manifestó que como todavía no fue notificado oficialmente de la demanda, instaurada en Belo Horizonte, no se pronunciará por el momento.
El valor de la demanda, con la corrección monetaria, asciende a 3,38 millones de reales (unos 643.196 dólares).
“Uno lamenta tener que entrar con una acción ante la Justicia laboral, porque nunca se esperó llegar a esto. Pero los traumas fueron grandes, no pensábamos en la idea de tener que remover todo eso de nuevo (la tragedia). Se intentó (la conciliación) de todas formas, pero no se avanzó”, lamentó la jurista.
El jugador, de 31 años, terminó como capitán en la campaña que les dio el título de la Serie B de 2020 y finalizó este año, pero no renovó con el Chapecoense y aceptó entonces una oferta del Cruzeiro de Belo Horizonte, que estará este año nuevamente en la segunda división.
No obstante, el Cruzeiro decidió cederlo a su vecino América para disputar la Serie A de la Liga brasileña, que comienza esta semana.
El accidente que diezmó al Chapecoense ocurrió el 28 de noviembre de 2016 cuando el avión en el que el equipo viajaba a Medellín, para disputar la final de la Copa Sudamericana ante el Atlético Nacional se estrelló 17 kilómetros antes de llegar al aeropuerto de la ciudad colombiana de Rionegro.
En la tragedia murieron 71 de las 77 personas que se encontraban en la aeronave de la aerolínea boliviana Lamia, entre ellos tripulantes, jugadores, miembros de la dirección y del cuerpo técnico, así como una veintena de periodistas que acompañaban al club en su primera final de un torneo internacional. EFE