La industria del fútbol europeo se ha contraído por primera vez en una década, registrando unos ingresos totales de 25.200 millones de euros en la temporada 2019-20, un 13% menos que en el ejercicio anterior, según recoge la 30ª edición del informe de Deloitte ‘Annual Review of Football Finance’, que analiza el impacto económico y comercial generado por las principales ligas de fútbol en Europa.

“Aún es pronto para conocer de manera completa y en detalle el impacto económico que la crisis derivada de la COVID-19 está teniendo sobre el fútbol europeo, aunque ya se empieza a vislumbrar el alcance de éste en los clubs. En concreto, se puede ver el impacto que la pandemia ha supuesto en el ‘matchday’, considerando que los ingresos combinados de los equipos de LaLiga cayeron un 19% en los días de partido, debido al cierre de los estadios y el veto de entrada a los aficionados”, indicó Javier Moncada, gerente de Risk Advisory, experto en Sports & Entretenimiento de Deloitte.

En total, las cinco grandes ligas europeas generaron unos ingresos de 15.000 millones de euros en 2019-20, un 11% menos que en la temporada anterior. La Premier League continua líder en el ranking europeo, con 5.134 millones de euros en ingresos, aunque sufrió una caída histórica del 13% con respecto a la temporada anterior (2018-19).

Por su parte, LaLiga registró unos ingresos de 3.117 millones de euros la temporada 2019-20, un 8% menos que la anterior, y cedió el segundo puesto del ranking a la Bundesliga, con 3.208 millones de euros en ingresos y que ganó un 4% menos respecto a la temporada anterior.

La Serie A de Italia, con ingresos de 2.100 millones de euros (18% menos) y la Ligue 1 de Francia, la única que canceló su temporada anticipadamente como respuesta a la pandemia, con ingresos de 1.600 millones de euros (16% menos), completan el total de ingresos de 15.100 millones de euros alcanzados por las cinco ligas ‘top’ en Europa, lo que representa una caída del 11% respecto al ejercicio anterior.

El informe recoge el impacto de la pandemia en los ingresos del día del partido (‘matchday’) en la temporada 2019-20, así como el efecto en las dos mayores fuentes de ingresos de las cinco grandes ligas: la retransmisión televisiva, que representa el 51% de los beneficios de los clubes, y comercial (36%).

Sin embargo, las perspectivas son optimistas para el sector, especialmente en materia de los derechos de retransmisión en las cinco grandes ligas europeas. La Premier League, por ejemplo, optó por renovar sus acuerdos con socios locales por el mismo valor, mientras que la Serie A acordó una reducción del valor del 5% en su nuevo acuerdo local.

“A pesar de la incertidumbre generalizada que ha provocado la pandemia, el fútbol ha demostrado una gran capacidad de resiliencia, por lo que cabe mirar con optimismo la temporada 2021/22, que puede convertirse en el salto definitivo hacia la normalidad y hacia una recuperación sólida en términos de ingresos para las temporadas siguientes. La vuelta a la actividad de manera segura, no solo de los deportistas sino también de los aficionados, es un aspecto clave para limitar el impacto económico total que resulte”, concluyó Moncada.