El dueño de una tercena estaba en el mostrador de su frigorífico cuando llegó un hombre a dejarle tres balas dentro de un sobre.
Antes de marcharse le dijo que debía pagar una “vacuna” a cambio de no hacerle daño a ningún miembro de su familia. Diez minutos después, el comerciante recibió una llamada donde le exigían el pago de cinco mil dólares para no matarlo.
La víctima entró en pánico y depositó el dinero a través de Western Union. Tres meses después, el delincuente volvió a llamarlo para exigirle más dinero.
En ese momento el comerciante presentó la denuncia en la Fiscalía de Manta y cerró para siempre su negocio.
Este caso, que investiga el fiscal Paco Delgado, se halla en etapa de indagación previa y aún no hay detenidos. Este tipo de extorsión se denomina “vacuna”, que en otras palabras sería el pago de dinero a cambio de recibir una supuesta “seguridad”.
El fiscal dice que en Manta existen algunos casos, pero la mayoría de las víctimas callan por temor. Este tipo de amenazas tuvo un repunte en el país desde el año 2020, cuando surgió la pandemia, y ahora se ha triplicado por delincuentes que fingen ser cabecillas de bandas delictivas ligadas al narcotráfico, según la Policía.
La “vacuna” es un delito que está tipificado en el Código Orgánico Integral Penal bajo la figura de extorsión, intimidación y hostigamiento.
> Llamadas. El fiscal manifestó que en algunos casos las víctimas han accedido al pago de la extorsión porque son amenazados de forma violenta y entran en zozobra por temor a perder la vida.
Él pide no desmoralizarse y presentar la denuncia inmediatamente, debido a que la mayoría de los extorsionadores son extranjeros. “Incluso se identifican como líderes de bandas cuando realmente no lo son”, reveló el funcionario.
Dijo que existen casos donde exigen 50, 100 y 200 dólares mensuales a personas que son dueñas de panaderías, heladerías, farmacias, tiendas y bazares.
A una comerciante del Nuevo Tarqui la intentaron extorsionar con 300 dólares para darle seguridad, y lo primero que hizo fue bloquear el número y nunca más la volvieron a llamar.
El mayor de Policía Marco Custode, jefe de la Unidad de Investigación Antisecuestros y Extorsión (Unase), dijo que las “vacunas” son ejecutadas por oportunistas que buscan lucrarse del progreso de los demás.
Pide a las víctimas no dejarse llevar por miedo ni acceder al pago.
“El método más efectivo para evitar ser extorsionado es no responder llamadas de desconocidos. En ese momento se corta algún intento de extorsión”, agregó el oficial. Si las llamadas son reincidentes, recomiendan cambiar de número. Y si de pronto insisten con mensajes a través de WhatsApp, sugiere no responder y bloquearlo de forma inmediata.
Custode también sugiere no publicar fotografías íntimas en las redes sociales, porque algunos delincuentes toman esa información para saber quiénes son sus amigos, sus hijos y el lugar de trabajo, y hasta conocer las placas de sus carros.
En este año han capturado a 19 personas por extorsión en Manta, y ninguno de los detenidos era miembro de alguna organización delictiva.
Las víctimas de las “vacunas” son las personas que tienen panaderías, tiendas, locales comerciales, restaurantes, bares; transportistas e incluso pescadores.
Ellos son amenazados a través de llamadas telefónicas para pedirles dinero a cambio de no robarles y matarlos.