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La Ley de Salud Mental de Ecuador irá al Registro Oficial, esto tras permanecer diez años estancada en la Asamblea Nacional.

El trámite tomó más de diez años en la Asamblea, y concluyó este 14 de diciembre de 2023 con el allanamiento a las objeciones del Ejecutivo.

La Ley de Salud Mental aborda problemas como el suicidio.

Según la Legislatura, este cuerpo legal promueve, regula y garantiza el pleno ejercicio del derecho a la salud mental.

Los beneficiados son las personas en todo su ciclo de vida, bajo un modelo de atención integral y comunitario.

Con 130 votos a favor, el Pleno resolvió allanarse a las observaciones que, en su tiempo, habían sido formuladas por el entonces presidente Guillermo Lasso.

El Ecuador no tenía una regulación sobre salud mental y la actual Asamblea la tramitó luego de estar represada diez años.

Cuidados y prevenciones

La Ley está orientada a fomentar las prácticas de vida saludables en cada uno de los ciclos de vida del ser humano, sus familias y la comunidad.

Esto se lograría a través de programas y planes de promoción, prevención y protección de la salud mental.

Además, garantizará el acceso a servicios de salud y medicamentos para quienes los necesiten, mediante políticas de aseguramiento y cobertura en el sector público y privado.

También desarrolla el establecimiento de un Plan Nacional de Salud Mental en coordinación con los gobiernos autónomos descentralizados.

La necesidad de esta ley se hizo evidente con la pandemia del covid-19.

Tras esta enfermedad, en el país aumentaron los casos de ansiedad, ataques de pánico, depresión, tasas de suicidio, consumo de alcohol y las situaciones de violencia.

“Este proyecto reconoce que la salud mental es parte de la salud integral de las personas”, subrayó la asambleísta Ana Herrera, ponente del proyecto de ley.

La legisladora mencionó que, aproximadamente, una de cada ocho personas sufre de trastorno mental.

La lesgiladora indició que el suicidio es una de las principales causas de muerte entre los jóvenes en el país.

En el debate, los parlamentarios señalaron que, según la recomendación de la Organización Mundial de la Salud, deben existir 23 especialistas por cada 10 mil habitantes.

En Ecuador existe una brecha de necesidades de cerca de 2.056 psicólogos en primer y segundo nivel de atención.