Ednaldo Rodrigues, destituido como presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), solicitó al Tribunal Supremo anular la decisión del Tribunal de Justicia de Río de Janeiro que lo apartó del cargo por presunto fraude en un documento. Advirtió que la intervención judicial podría llevar a la FIFA a excluir a Brasil de la liguilla sudamericana para el Mundial 2026.
Apelación al Tribunal Supremo
Rodrigues, de 71 años, presentó un recurso ante el Tribunal Supremo de Brasil para suspender la destitución ordenada el jueves por el Tribunal de Justicia de Río de Janeiro. La decisión dictada por el juez Gabriel de Oliveira Zefiro, declaró nulo un acuerdo de enero que ratificó a Rodrigues en la presidencia. En la misma se señala una posible falsificación en la firma del expresidente de la CBF, Antonio Carlos Nunes de Lima, quien estaría en incapacidad mental para firmar.
Los abogados de Rodrigues denunciaron que la destitución representa una “afrenta al orden constitucional” y solicitaron medidas cautelares para mantenerlo en el cargo. También dijo que la intervención pone en riesgo el funcionamiento regular de la CBF, ante la FIFA y la Conmebol.
Alerta de sanciones
Rodrigues advirtió que, si FIFA no reconoce la legitimidad de las nuevas autoridades de la CBF, podría rechazar la lista de jugadores convocados para los partidos de la liguilla sudamericana clasificatoria para el Mundial 2026, programados contra Ecuador y Paraguay en junio. Esto, según el dirigente, podría excluir a la selección brasileña de dichos encuentros, generando un “impacto deportivo, financiero y diplomático de proporciones inconmensurables”.
La FIFA y Conmebol han sancionado a federaciones bajo intervención judicial, como ocurrió en 2023, cuando Brasil enfrentó presiones que llevaron a la restitución temporal de Rodrigues tras una suspensión.
Nuevo interventor y elecciones
El Tribunal de Río designó a Fernando Sarney, vicepresidente de la CBF, como interventor, con el mandato de convocar elecciones “lo más rápido posible” para elegir nueva directiva. Sarney anunció una asamblea general electoral para el 25 de mayo, donde se elegirán un presidente, ocho vicepresidentes y otros cargos para el periodo 2025-2029.
Sarney aseguró que mantendrá los contratos vigentes, incluyendo la contratación del técnico italiano Carlo Ancelotti, quien asumirá la selección el 26 de mayo.
Brasil y su crisis dirigencial
La destitución de Rodrigues llega en un momento crítico para Brasil, que busca recuperarse tras la derrota 4-1 ante Argentina en marzo. La llegada de Ancelotti, anunciada tres días antes de la destitución, generó expectativas para mejorar el desempeño de la Canarinha en las eliminatorias sudamericanas.
El conflicto en la CBF tiene raíces en disputas legales sobre la elección de Rodrigues en marzo de 2022, anulada temporalmente en 2023 por irregularidades. Un acuerdo en enero buscó resolver estas disputas, pero la reciente nulidad del documento reavivó la crisis.
Reacciones y posturas
Se indicó que 19 de 27 federaciones de fútbol de Brasil apoyaron la convocatoria a elecciones, pidiendo “pasar la página de judicialización” y abogando por una “renovación de ideas”. La asesoría jurídica de la CBF calificó el nombramiento de Sarney como “ilegal” y reiteró el riesgo de sanciones internacionales.
Rodrigues, reelecto en marzo por unanimidad para el periodo 2026-2030, fue el único candidato tras la retirada del exjugador Ronaldo Nazário. Su gestión impulsó la contratación de Ancelotti, aunque el italiano aún debe dejar el Real Madrid tras una temporada irregular.