Los estadounidenses celebraron ayer en familia el Día de Acción de Gracias, una festividad marcada este año por fuertes medidas de seguridad en los concurridos centros de transporte ante la alerta terrorista global por los recientes atentados yihadistas del Estado Islámico (EI).
La alerta terrorista global emitida esta semana por el Departamento de Estado y el temor tras los recientes ataques yihadistas parecen no haber afectado, como se temía, a los desplazamientos del día familiar por excelencia en Estados Unidos.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, animó en la víspera a viajar con normalidad porque no hay “ninguna información específica y creíble” que apunte a un ataque terrorista en el país.
No obstante, el aumento de la presencia policial es visible en aeropuertos, estaciones de tren y otros centros de transporte desde hace varios días.
En Washington, un hombre fue detenido por saltar la verja del jardín norte de la Casa Blanca, según informó la CNN.