La Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos (FCC) aprobó la propuesta de considerar internet como servicio público, una decisión clave que permitirá aumentar la regulación para garantizar el carácter abierto de la red y evitar los llamados “canales rápidos” de pago.
La votación se saldó sin sorpresas, con tres votos a favor y dos en contra, con el respaldo de los miembros demócratas, entre ellos el presidente del organismo Tom Wheeler, y la oposición de los republicanos.
La propuesta había sido presentada por Wheeler a comienzos de mes con el objetivo de asegurar el conocido como principio de “neutralidad de la red”, que sostiene que no debe permitirse a los proveedores de internet ralentizar el acceso a ciertas páginas web.