"El niño falleció a las 02.50 hora de Moscú (...). Tenía quemaduras muy graves y otras heridas", dijo a la agencia oficial rusa RIA-Nóvosti Oxana Semiónova, portavoz del Departamento de Emergencia de Karelia, república rusa fronteriza con Finlandia, donde se produjo el siniestro.
El menor era uno de los ocho supervivientes del accidente aéreo, entre los cuales se encuentra su hermana, ingresada actualmente en un hospital de Moscú.
La madre de los menores falleció durante el accidente.
El Tu-134, perteneciente a la compañía de vuelos chárter de lujo Rusair, se estrelló en una carretera a un par de kilómetros de su aeropuerto de destino, el de Petrozavodsk.
A bordo del aparato, un birreactor con más de treinta años de servicio, se hallaban 43 pasajeros y 9 tripulantes.
El Comité de Instrucción (CI) de Rusia declaró que hay tres líneas centrales de investigación: error humano del piloto o de los servicios de tierra, desperfectos técnicos de la nave y las condiciones meteorológicas en el momento del aterrizaje.  Todo se está investigando.

PRUDENCIA.
El portavoz del CI, Vladímir Markin, hizo un llamamiento a no sacar conclusiones apresuradas y a esperar los resultados de las investigaciones.
Sin embargo, el viceprimer ministro ruso, Serguéi Ivanov, declaró el día de la tragedia que, según datos preliminares, el accidente fue causado por la conjunción de un error del piloto y las condiciones meteorológicas adversas. <