En la sociedad manabita, y en todo Ecuador en general, es necesario que tanto los gobiernos locales como el nacional establezcan políticas para prevenir la violencia de género.
Gran parte del trabajo que se hace es reactivo. Se actúa una vez que se tiene conocimiento de casos específicos y, peor, en muchas ocasiones se requiere que se interponga una denuncia para ello.
Entonces ahí es cuando se emiten medidas protectivas que, en muchas ocasiones, no se acatan. Lo que se necesita es trabajar en prevención para evitar nuevos casos.
“Lo que se necesita es trabajar en prevención para evitar nuevos casos”.
La tarea puede ser lenta y contracorriente, pero hay que empezar y mantener el trabajo. El empoderamiento y la ruptura de patrones culturales son dos de sus aristas.
Además, se debe ofrecer mecanismos de protección a las víctimas para impedir la repetición de estos actos con hechos que, como ha ocurrido antes, incluso pueden desembocar en asesinato y femicidio.
La sociedad entera debe colaborar en ello. Hay casos que sacuden sus cimientos, para hacer conciencia de que es un problema de todos.
Editorial de El Diario publicado este sábado 26 de noviembre del 2022 en nuestra edición impresa.