Las declaraciones del ministro de Transporte y Obras Públicas (MTOP) sobre la vía Circunvalación de Manta-Colisa de Jaramijó causan sorpresa y malestar.
Sorpresa porque denuncia que existe una confabulación entre quienes tienen que resolver sobre el estado de la vía, es decir la Contraloría, la Fiscalía, la Justicia, la compañía aseguradora que emitió el seguro de buen cumplimiento, el Estado como contratante y la empresa contratista.
Y malestar porque él, en su calidad de autoridad nacional, debe pasar de una simple declaración periodística a denunciar lo que ha encontrado ante las autoridades respectivas.
“A casi ocho meses del gobierno, se necesita concreciones”.
Si denuncia que hay una confabulación, lo que se espera es que exponga, con nombres y apellidos, a quienes confabulan contra el desarrollo de Manabí. Si hay confabulación entre la compañía de seguros y la Superintendencia del ramo, tiene que denunciarlo. Si es entre el juez que conoce la causa y los políticos, tiene que denunciarlo.
También causa malestar que se piense que con el pago de un peaje, sea la provincia la que deba pagar la confabulación por el ministro denunciada.
En sus visitas a Manabí, el ministro ha expresado su deseo de hacer avanzar estas obras abandonadas por la corrupción del gobierno del expresidente Correa y su Comité de Reconstrucción.
Estas buenas intenciones del ministro deben ser acompañadas por acciones concretas que permitan alcanzar el objetivo.
Editorial de El Diario publicado este jueves 6 de enero del 2022 en nuestra edición impresa.
