La prevención del consumo indebido de drogas requiere un trabajo más dedicado, tanto de los organismos de seguridad como de las instancias educativas.
Los estudios demuestran que cada vez es más frecuente el uso de drogas a temprana edad. En Ecuador, la edad promedio para ello está entre los 14 y 15 años, y los más vulnerables son los adolescentes del sexo masculino.
Hay que poner énfasis en el aspecto educativo. La mitad de los adolescentes cree que hay venta de drogas en el colegio o en sitios cercanos. La Policía emprendió hace unos años un plan contra el microtráfico en los planteles educativos, que dio sus resultados, pero con las clases virtuales ha quedado en espera.
“Hay que hacer conciencia en niños y adolescentes del riesgo del consumo de drogas”.
Sin embargo, la represión no siempre es lo recomendable. Se debe crear conciencia en los niños y adolescentes de los riesgos que conlleva para la salud, e incluso para la vida, el hábito de consumir drogas ilícitas. Esta labor, en que deben participar docentes y psicólogos, debe involucrar a los padres de familia.
Mientras no haya un trabajo con enfoque integral, las drogas seguirán siendo una amenaza para la niñez y la adolescencia. Debería ser una prioridad para el Estado.
Editorial de El Diario publicado este martes 25 de enero del 2022 en nuestra edición impresa.